La consejera de Cultura, Política Llingüística y Turismo, Berta Piñán, indicó ayer, en la Comisión de Cultura de la Junta General, que, aunque tiene la intención de acometer en este ejercicio las obras e intervenciones en el patrimonio cultural previstas en los Presupuestos de 2020, los retrasos por el parón administrativo provocado por la pandemia de coronavirus obligarán a retrasar algunos proyectos, que se ejecutarán entre este año y el que viene.

El diputado de Foro Pedro Leal preguntó a la Consejera sobre las obras y proyectos culturales cancelados durante el confinamiento. Piñán admitió que "muchos quedaran para 2021". Continuarán adelante, dijo, con las actuaciones en el Camino de Santiago, en las iglesias de Caleao, en Caso, y San Miguel de Lillo, en Oviedo, y en el monasterio de Cornellana. Acabarán las obras de la biblioteca de Piedras Blancas, en Castrillón, y empezarán las de la Casa de la Música de Candás.

La Consejera indicó que durante el estado de alarma se han cancelado 1.143 actividades culturales y aseguró que tiene la intención de reprogramar todo lo que sea posible. Avanzó que la Sinfónica del Principado, la OSPA, ofrecerá un programa de conciertos en núcleos rurales. Las exposiciones temporales del Museo de Bellas Artes se harán entre julio y diciembre, y Laboral Centro de Arte mantiene las muestras previstas, salvo la de EDP, que se aplazará.