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Alarma: Pekín echa el cierre

La capital china desinfecta mercados, restaurantes y campus, cancela 1.200 vuelos y pide no salir de la ciudad ante el rebrote de covid-19

Un hombre lleva cajas de alimentos hasta la valla que delimita una zona confinada de Pekín. EFE

El rebrote de coronavirus en China sumó el martes 44 nuevos casos detectados, 31 de ellos en Pekín, que es ahora el principal foco de alarma sanitaria para las autoridades del gigante asiático. Hay también 11 nuevos casos “importados” y dos contagios locales más: uno en la provincia septentrional de Hebei, vecina de la capital, y otro en la oriental de Zhejiang. En total, el rebrote detectado hace una semana en el mercado mayorista de Xinfadi, el principal de alimentación de Pekín, deja hasta ahora 137 casos confirmados.

Ante la gravedad de la situación, y para evitar la propagación masiva del rebrote, Pekín aumentó el martes por la noche el nivel de emergencia en la ciudad, que pasa del tercero al segundo, lo que se tradujo en una fuerte restricción de actividades. Por ejemplo, las comunidades de vecinos volverán a comprobar la identidad y a tomar la temperatura de los residentes.

Además, se suspenden todas las clases presenciales en educación primaria, secundaria y superior, y se recomienda a los pequineses que teletrabajen. Pero, más importante, aquellas zonas de la urbe que sean consideradas de “alto riesgo”, esto es, donde haya habido nuevos contagios confirmados, quedarán selladas y no se permitirá que nadie salga de ellas. En general, las autoridades sanitarias recomiendan no salir de la capital, por lo que la inmensa urbe entra de nuevo en fase de confinamiento parcial.

Cierran los mercados subterráneos; bibliotecas, museos y parques abrirán solo unas horas al día y con un aforo que no supere el 30 por ciento de su capacidad, y se suspenden los vuelos entre provincias y quedan prohibidos los viajes en grupo transprovinciales.

A esas medidas, anunciadas el martes, se sumó ayer la orden de desinfectar todos los mercados, restaurantes y campus universitarios de la capital, y la obligación de realizar test de coronavirus a sus trabajadores y encargados. El portavoz municipal, Xu Hejian, anunció que conducirán “una inspección preventiva integral en todos los mercados, restaurantes y comedores”, incluyendo la realización de test de ácido nucleico.

La desinfección de todos los restaurantes de Pekín y la realización de test en ellos es una operación a gran escala si se tiene en cuenta que hay decenas de miles de establecimientos de este tipo en la capital. Hasta primeras horas del martes, Pekín había desinfectado 276 mercados de productos agrícolas y cerrado 11 mercados subterráneos y semisubterráneos, además de 33.173 servicios de reparto de comida a domicilio.

Por su parte, la prohibición de vuelos dejó ayer un saldo de 1.255 cancelaciones, tanto de entrada como de salida de Pekín, según informó la prensa local. En concreto, fueron cancelados 615 vuelos de salida y 640 de entrada, según el rotativo “Global Times”, desde que Pekín decidiera pasar del tercer al segundo nivel de emergencia en la ciudad, en un intento de atajar el rebrote del virus detectado en el mercado de Xinfadi.

El total de casos confirmados que permanecen ahora activos en China es de 252, siete de ellos en estado grave, de entre los 83.265 contagios contabilizados desde el comienzo de la pandemia, que ha causado en el país 4.634 muertes.

Con todo, la comisión nacional sanitaria china no ha informado de ninguna nueva muerte en todo el país, aunque añadió a la lista dos casos graves y otros dos que han sido dados de alta. Otros 116 contactos cercanos fueron liberados de observación médica.

Mas de 650 positivos en un matadero de Alemania

Mas de 650 positivos en un matadero de AlemaniaLa cifra de infectados por coronavirus entre los trabajadores de un matadero en la ciudad alemana de Gütersloh (oeste) superó los 650 positivos ayer por la tarde, lo que llevó al distrito a decretar el cierre de escuelas y guarderías, aunque no, por ahora, un confinamiento generalizado.

Según informó un portavoz del distrito a medios alemanes, de los 983 test realizados hasta ahora han dado positivo 657, aunque no se descarta que el número aumente, ya que en las instalaciones de la empresa cárnica Tönnies han trabajado hasta 7.000 personas en los últimos tiempos.

La empresa anunció el cierre total de la planta. Los trabajadores contagiados y las personas con las que han estado en contacto -tanto compañeros de trabajo como familiares- tendrán que guardar cuarentena. La canciller Merkel "saludó" que el distrito hubiera tomado rápidamente y sin dudar medidas restrictivas.

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