“La boca está para más cosas que decir tonterías”. Las opiniones sobre establecimientos vertidas en plataformas online generan algún que otro encontronazo entre clientes y empresarios. Esto es lo que ha sucedido en un establecimiento de Oviedo, después de que un cliente criticase que le había tratado mal por ir vestido informal.

El relato del cliente insatisfecho es el siguiente: “La comida no fue como la primera vez que estuve. Además, como estábamos vestidos de vaqueros con playeras la atención no fue muy buena. Cuando pedimos el café ( no habíamos pedido postre) no nos sirvieron una pasta (realmente no tienen por qué....), pero solamente a nosotros. Al resto de las mesas sí les sirvieron las pastas. Esto realmente me hizo tomar la decisión de no volver. No me gusta sentirme diferente a los demás, pero ese día me hicieron sentirme mal”.

El comentario no gustó al propietario del establecimiento, que no tardó en contestar. “Aquí no se discrimina a nadie. Para empezar, los que vamos de vaqueros, playeros y un delantal somos nosotros, por si no te fijaste en eso. Si no se te puso la pastita del café perdónanos, ha sido un fallo imperdonable, te prometo que no lo volveremos a hacer, mira que se la ponemos a todo el mundo, pero la gente normal como nosotros a veces nos equivocamos. E, incluso, la gente normal nos dice ‘oye, no nos pusiste la pastita’. Nos disculpamos, se la ponemos y se acabó la cosa. La boca está para hablar con las personas aparte de para decir tonterías”, carga el empresario, que termina mandando un cordial saludo al crítico, en cuyo perfil dice ser natural de Valladolid.

Las disputas entre clientes y empresarios a través de la red son cada vez más frecuentes. En muchas ocasiones los hosteleros denuncian que algunas de las malas críticas que reciben son falsas y están hechas para perjudicar al establecimiento. Más de uno no duda en señalar a otros empresarios de la competencia como autores de estos mensajes.

Para tratar de frenar este tipo de situaciones, son muchos los hosteleros que reclaman a estos portales que filtren bien los mensajes y a sus autores, a fin de evitar que pasen de ser un servicio útil para los ciudadanos a un arma arrojadiza y tóxica para el sector. Actualmente, en la red existen diversas páginas que alojan este tipo de comentarios e imágenes sobre establecimientos.