Las piezas de arte creadas por el tinetense Iván Pérez Vidal, doctorando en la Facultad de Bellas Artes de Cuenca, han recorrido galerías y centros de arte de medio mundo y ahora se pueden ver en el espacio artístico y cultural Lamosa, en Cuenca, hasta el 26 de julio.
En la exposición "Retablo de las últimas cosas", el artista asturiano reúne siete piezas, algunas creadas expresamente para esta exposición, ubicada en la que fuera la iglesia del convento de las Angélicas.
Una de las obras principales de la exposición, y de la que toma el título, es la que fue diseñada para ocupar la zona del retablo de la antigua iglesia. Se trata de una composición de 330 churros de cerámica de diferentes formas. "Salió una broma con la escatología en el sentido católico, como la rama de la teología que se dedica a estudiar lo que hay antes y después de la existencia, y el churro es una expresión de lo que puede hacer un crío cuando empieza a hacer cosas, lo más simple que se puede hacer en el arte. Sin embargo, es la pieza más complicada de hacer y de montar de la exposición", explica su autor.
Una botella de agua y una miga de pan llena de céntimos clavados a su alrededor son otros de los objetos que se pueden encontrar en la muestra. Con la primera el artista quiere hacer pensar sobre "el agua, la huella ecológica y la posibilidad de elegir entre cosas que son iguales". La segunda "es una provocación, un juego sobre el valor del objeto artístico". La educación, la casa o el mérito son otras temáticas que aborda la exposición.
Iván Pérez hace tiempo que no expone en Asturias. Le gustaría volver a mostrar su trabajo en su tierra. A lo largo de varios años ha realizado vídeos de la Descarga de Cangas del Narcea que le gustaría poder exhibir en esa localidad algún día.
