Teóricos de la conspiración, negacionistas de la pandemia, antivacunas y defensores de pseudoterapias se concentraron ayer en Madrid para clamar contra "la farsa de la pandemia". La protesta, convocada para protestar contra "el bozal", reunió a unas 2.500 personas, según fuentes policiales, en una plaza de Colón abarrotada de gente y en la que apenas se vieron mascarillas sobre los rostros.

El gentío ha coreado varios cánticos contra la pandemia. "¡El virus no existe! ¡Los hospitales están vacíos!", han gritado unos. "Lo que mata es el 5G", han gritado otros. En las pancartas se han leído lemas contra las vacunas, que sostienen que han sido diseñadas por Bill Gates para implantar microchips en la población y lograr el control mental de las masas. También lemas a favor del derecho a beber clorito sódico, un derivado de la lejía utilizado como desinfectante. Agentes de la Policía Nacional se personaron en la entrada de la plaza pidiendo a los asistentes que se pusieran la mascarilla, pero una vez dentro, fueron muchos los que se despojaron de su protección al grito de "Bote, bote, bote, aquí no hay rebrote".

Los manifestantes también profirieron consignas contra la gestión del Ejecutivo central, al que acusaron de "atentar contra los derechos humanos", porque, según los participantes, "las personas sanas no deberían llevar mascarillas", lo cual consideran "una auténtica tortura".

Varios centenares de personas se concentraron también ayer en el centro de Bruselas para protestar contra las medidas sanitarias para frenar la expansión del coronavirus, que consideran "desproporcionadas ante la escala y la amenaza de la enfermedad" y que tildaron de "coronacirco".