García de Marina (Gijón, 1975) es el autor de la fotografía que va a servir como base para un sello de 1,5 euros que se presentará este año.

–¿Qué tal sientan 180.000 reproducciones de la foto de uno en forma de sello?

–Cuando Ricardo Fernández, el comisario de la exposición de arte postal de Avilés, me dijo que habían elegido mi fotografía, no caí en la cuenta del número de ejemplares que iban a tirar: 180.0000. No sé bien si lo que siento es más que felicidad.

–¿Y cómo fue el parto? Porque la foto elegida tiene un tiempo.

–Formaba parte de una exposición “Diálo2” que se vio en el Barjola en 2018. En ella había obra mía y también de Joan Brossa. La foto que ha pasado ahora a sello es una adaptación de aquella. Supe de la convocatoria de la muestra de Arte Postal de Avilés [se despidió ayer] y presenté una obra que adecuaba a ella. Me interesaba porque era en el palacio de Valdecarzana, al que tengo afecto porque fue el lugar que acogió una de mis primeras exposiciones: allá por 2013.

–Pues parece premonitoria.

–La imagen la hice, como le digo, en 2018. Un amigo tenía una mascarilla y la bola del mundo la tenía en casa. La combinación de color de las dos piezas era interesante. Así que tiré. Tiendo a trabajar con la atemporalidad. Y en este caso ha funcionado: una idea de hace dos años parece que dice otra cosa en 2021.

–Y ahora, ¿qué?

–Le pedí a Ricardo Fernández estar al tanto del desarrollo del proyecto. Quiero vivir la experiencia de la edición.

–¿Por qué se hizo fotógrafo?

–Todo empieza en 2010, cuando compré una cámara de fotos. En 2012 hice mi primera exposición, pero fue como “hobby”. Aprendí esto con un curso “online”, participando de foros aficionados. Con los años he descubierto que necesito contarme y contar lo que me rodea con lo que tengo en casa.

–La huella de Chema Madoz en su obra parece muy clara.

–Por supuesto. Cuando empiezas siempre tienes que guardar respeto a alguien que te ha antecedido:es un Premio Nacional. Pero pienso que mi influencia mayor está en Joan Brossa.

–¿Por dónde va su trabajo ahora?

–Espero inaugurar en San Petersburgo, en Rusia, el próximo 5 de agosto. Espero que el covid no lo impida. Será en el museo Erarta, el mayor privado de arte contemporáneo.