“Los cambios te obligan a reinventarte”. Así de rotundo se manifiesta el diseñador moscón Marcos Luengo después de un año difícil en el que empieza a ver la salida del túnel y que le llevará a ampliar horizontes en el diseño a México y Colombia, tras el éxito de su colección en Panamá. “El negocio empieza a levantar cabeza, después de un año tremendamente difícil”, subraya el creador que se llevó la decepción de no haber podido viajar a México y Colombia el año pasado por la pandemia, ya con los billetes en la mano. Una espina que confía en poder quitarse dentro de poco.

La pandemia le ha llevado a reinventarse, ese ha sido el eje sobre el que ha pilotado su negocio en este año, complicado para la moda y sus ventas, en el que la digitalización ha sido el arma con la que combatir el cierre temporal de las tiendas. “Hemos empezado con la venta online de complementos y hemos descubierto que tenemos clientes desde Nueva York a Arabia Saudí”, aseguró satisfecho.