“No podemos ir al Museo del Prado a ver siempre las obras de Goya o ‘Las Meninas’ de Velázquez, también hay otras salas con cosas muy interesantes”. Es la comparativa que utiliza el violinista Emilio Moreno, director de “La Real Cámara”, para explicar la “golosina” que interpretará con su formación el miércoles en el auditorio Príncipe Felipe de Oviedo (19.00 horas) dentro de la VIII Primavera Barroca. “La Real Cámara” ofrecerá al público ovetense el “op. 4” atribuido a Francisco José de Castro, jesuita español afincado en Italia a caballo entre los siglos XVII y XVIII.
La formación liderada por Moreno regresa a Oviedo “para completar la ‘ópera omnia’ conocida de De Castro”. Hace dos años interpretaron el “op.1” y ahora harán el “op. 4”, las dos únicas piezas que se conservan del jesuita.
Teólogo y traductor al latín y al italiano de la obra de los místicos españoles, Francisco José de Castro falleció en Roma en 1724 al servicio del gran duque de Toscana, Cosme III de Medici, y del cardenal Corsini, luego Papa Clemente XII. Como músico “es un autor muy poco conocido pero es de los pocos músicos españoles que hace música en estilo italiano y que lo hace muy bien”, explica Moreno. En la obra que interpretarán el miércoles “se sale de la línea romana del gran Corelli que se puede apreciar en el ‘op.1’ de 1695”. De Castro había estado viviendo en Bolonia, y ahí “entra en contacto con otras maneras de hacer música”. Son las músicas de Torrelli. Por eso “La Real Cámara” introducirá piezas de este compositor en el programa del miércoles.
Emilio Moreno considera a De Castro además de “un autor español muy significativo pero muy desconocido, un iceberg extrañísimo de un tipo de música que no se hacía en España”. Concede que la recuperación que han hecho del autor “no es una supernovedad”, ya que existe una grabación de hace algunas décadas, “aunque sin criterios históricos y sin los instrumentos adecuados”.
Las partituras de las obras de De Castro se conservan en la biblioteca del Conservatorio de Bolonia y ahí ha ido a buscarlas Moreno. “Uno de los problemas que tenemos los músicos, por nuestra educación, es que pensamos que todo se puede comprar en la tienda de la esquina, estamos acostumbrados a tocar un repertorio muy trillado pero hay muchos otros compositores que no están publicados”, explica el violinista.
Lo mismo ocurre con el público, “al que siempre se le da música fantástica pero conocida”. “Por muy maravillosa que sea una sinfonía de Beethoven también hay otras cosas”, subraya Moreno. Una de ellas se escuchará el miércoles en Oviedo dentro del ciclo organizado por la Fundación Municipal de Cultura y el Centro Nacional de Difusión Musical.
