Bernardo Sanjurjo es, en palabras de Alfonso Palacio, director del Museo de Bellas Artes de Asturias, “el artista asturiano vivo más importante, por trayectoria y calidad”. Una decena aficionados al arte tuvieron la oportunidad de comprobarlo ayer en la visita guiada organizada por LA NUEVA ESPAÑA a la exposición “Bernardo Sanjurjo. Piel trabajada”, en la pinacoteca asturiana.

Palacio y la nueva responsable de actividades educativas del Bellas Artes, Cristina Heredia, fueron los encargados de guiar un recorrido por la vida y obra del autor. Heredia repasó a la biografía del artista nacido en Barres (Castropol) en 1940 y posteriormente trazó un recorrido a través de las obras de la muestra. Explicó Heredia cómo los motivos de la obra más antigua de la colección, que data de 1976, se repiten en lienzos de décadas posteriores.

Entre los visitantes, elegidos por orden de inscripción, había conocedores de la obra de Sanjurjo, uno de ellos su primo, Marcelino Castro Sanjurjo, que elogió una exposición que cree “un homenaje merecido y justo” a la trayectoria del pintor. Marcelino Castro no había visitado la muestra con anterioridad como sí había hecho la ovetense Isabel Hevia que reserva “una tarde de un martes al mes para visitar el Museo”. Así que cuando vio que el periódico organizaba un recorrido guiado gratuito por la “Piel trabajada” de Sanjurjo, se apuntó “sin pensarlo”.

La exposición puede visitarse en la planta baja del edificio ampliación del Bellas Artes hasta el próximo 30 de mayo.