La edición más atípica de Feten se despidió ayer con un balance muy positivo tanto para los organizadores como las compañías. La Feria Europea de Artes Escénicas para niños y niñas se celebró en Gijón este año de covid sin la presencia de compañías internacionales, y con un mayor peso para las asturianas. “Lo importante era sacar adelante la feria, estar ahí, enseñar el producto y tener contacto con los programadores”, explican los representantes de los grupos asturianos. Aunque también dejan como nota negativa la limitación de público y la ausencia de niños en algunos espectáculos. “Era algo que asumíamos, la reducción de aforos, pero actuar sin niños en alguna función, y solo para programadores, era algo complicado”, subrayan.

Feten contó, durante la última semana, con 39 compañías, que representaron 88 funciones. La cifra fue inferior a las 90 agrupaciones que hubo en 2020. También se redujo el número de programadores asistentes de 600 a 180. Pero para las compañías, en estos momentos complicados de pandemia y de retomar poco a poco la actividad, que la feria se celebrase ya es positivo. “Necesitamos este escaparate para que todo vuelva a rodar”, cuenta Adrián Conde, de la compañía que lleva su nombre. “Los frutos se verán más adelante, pero es verdad que ya tuvimos algún tanteo, espero que nos salgan muchos bolos”.

“Recuerdos”, una obra con fantasía, sentimiento, magia y humor fue la propuesta de Conde. “Este año éramos más asturianos, así que teníamos más visibilidad, era algo importante”, explica el director de esta compañía con tres lustros de vida.

“Higiénico Papel” presentó su trabajo “Desastres”. “Necesitábamos volver a salir y disfrutar de esa visibilidad que nos da fuera de Asturias esta feria”, recalca el intérprete Carlos Dávila. “A la hora de actuar echamos de menos ese calor del público infantil. Estar solo ante programadores es algo más frío. Eso nos invita también a pensar en las ganas de actuar poco a poco con más público”, añade.

Moisés González forma parte de “El Callejón del Gato”, que trasladó su propuesta de títeres “La niña de las trenzas al revés”. Valora con entusiasmo volver a reencontrarse con los colegas del sector: “Tomar el pulso a las creaciones más recientes siempre es importante. Ha habido limitaciones, para que fuese todo con seguridad, y ha salido muy bien”. Añade que considera necesario que se apuesta decididamente en la región por las artes para la juventud y la infancia. “Fuera da la sensación de que Asturias es un paraíso y que los niños ven teatro todo el día. Pero no es así”.

Feten celebró ayer su última jornada en Gijón con tres funciones. Por la mañana fue el turno en la Laboral para “Las pequeñas cosas”, de “La Mecánica”. Y en el Jovellanos estuvo la compañía “Marcel Gros” con “Artinauta”, que dobló y estuvo tanto por la mañana como por la tarde. La próxima semana, el jueves, se entregarán las distinciones de Feten, que en esta ocasión serán en formato virtual, sin la celebración de ninguna gala como en otras ocasiones.