Laboral Centro de Arte y Creación Industrial mantiene desde hace años una deuda creciente con la Sociedad Pública de Gestión y Promoción Turística y Cultural del Principado de Asturias (Recrea) a cuenta de los impagos en suministros y servicios relacionados con el funcionamiento de Laboral Ciudad de la Cultura. La situación alcanzó a ser tan complicada que Recrea llegó a temer que el centro de arte no pagase su deuda. Así consta en las cuentas anuales de la sociedad que gestiona el turismo regional, a las que ha tenido acceso este periódico, y en las que se corrobora la solución adoptada por los gestores de ambas entidades públicas para solventar la deuda: un nuevo calendario de pagos que ha disparado, de nuevo, la deuda de Laboral Centro de Arte.
La compleja relación entre ambas entidades ha vivido momentos de tensión. En 2015, la Fundación que gestiona el centro de arte, entonces una entidad privada con participación del Principado y el Ayuntamiento de Gijón, reconoció por primera vez una deuda con Recrea, debido al uso de los recursos de la Ciudad de la Cultura. En aquel momento, se reconoció un endeudamiento de algo más de 411.000 euros, que el centro de arte abonaría en diez años, en letras mensuales de 3.432 euros.
El acuerdo debería haber cerrado la crisis, pero la deuda se ha disparado en estos seis años. Los impagos y la falta de abono de intereses elevó en 433.636 euros la deuda del centro de arte con Recrea, según consta en las cuentas de esta última entidad de 2018. Pero el ajuste tardaría aún más de un año en completarse.
Entre medias, se produjo un cambio sustancial en la naturaleza de Laboral Centro de Arte: en enero de 2019, el Principado y el Ayuntamiento de Gijón, que acababan de asumir la deuda de la entidad con el Gobierno central, se hicieron con el poder total de la fundación que gestiona el centro, que pasó a integrarse en la red pública. Tanto es así que, en la actualidad, se da una singularidad, como es que el patronato de la Fundación que gestiona el centro de arte y el Consejo de administración de Recrea están presididos por la misma persona: la consejera de Cultura, Berta Piñán.
Sin duda, esta particularidad propició que el 24 de febrero de 2020, la fundación que gestiona Laboral Centro de Arte y Recrea firmaron un convenio para actualizar la deuda y establecer un nuevo calendario de pagos. Aunque este convenio no se hizo público, la entonces gerente de Laboral Centro de Arte, Lucía García, reveló su existencia en una comparecencia en la Junta General del Principado, el pasado 29 de abril. Las cuentas de Recrea del año 2019 aclaran la naturaleza de ese acuerdo.
Según se recoge en la página 17 de las cuentas de la entidad, al cierre de 2019 la fundación que gestiona Laboral Centro de Arte debía 682.244,95 euros a Recrea, una deuda que esta segunda entidad asumía como un activo a largo plazo. El débito fue reconocido por Laboral Centro de Arte el 24 de febrero de 2020, incorporando además unos intereses que elevaron la cantidad a pagar hasta los 721.712 euros, según la estimación de Lucía García, que fue apartada de la gerencia de Laboral Centro de Arte, tras catorce años en la entidad, al terminar su contrato el pasado 30 de mayo.
“Adicionalmente”, se añade en las cuentas, “se recoge en el largo plazo también el deterioro de la deuda que fue reconocido a cierre del ejercicio de 2018, y que recogía la deuda generada con posterioridad a la firma del anterior acuerdo, ahora caduco, desde marzo de 2015 hasta el cierre de 2018, que asciende a un importe de 433.636,95 euros. Por prudencia se decide mantener dicho deterioro e ir revertiéndolo a medida que se vaya cumpliendo el nuevo calendario de aplazamiento”.
La traducción de este apunte en las cuentas de Recrea es que Laboral Centro de Arte acumuló, en apenas tres años y medio, más de 433.000 euros de deuda con su “casero” en la Ciudad de la Cultura, y esta segunda entidad no se atreve a incluir sin más los ingresos del nuevo acuerdo en sus cuentas, a suprimir el “deterioro” de la deuda, por “prudencia”, ante el temor a que se reprodujesen los impagos. El deterioro irá desapareciendo a medida que se cobre la deuda.
El resultado del acuerdo es que Laboral Centro de Arte disparó, en plena pandemia, su deuda hasta 1,3 millones, con el agravante de que no se podrá sanear completamente, al menos, hasta 2032, cuando vence el calendario de pagos con Recrea. Actualmente, Laboral Centro de Arte abona a Recrea del orden de 14.000 euros mensuales, entre el pago por suministros y los 5.900 euros de letra por sus deudas.
