El pleno del Consejo del Patrimonio acordó ayer iniciar los trámites de declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) al “conjunto de bienes patrimoniales y colecciones artísticas promovidas por los Selgas en El Pitu, Cudillero”. El pleno aprobó incoar el correspondiente expediente de protección y ha dado de plazo hasta el 27 de septiembre a la Fundación Selgas-Fagalde “para entregar el inventario de los elementos que conforman el conjunto de su colección artística para llevar a cabo la tramitación”. Y al respecto avisa: “En caso de que no lo facilite, la consejería iniciará de inmediato el procedimiento de multas coercitivas previsto en la Ley de Patrimonio Cultural de Asturias”.
Esta actuación promovida por la Consejería de Cultura llega después de que trascendiera públicamente, a través de LA NUEVA ESPAÑA, la decisión tomada por la Fundación Selgas-Fagalde de poner a la venta sus dos principales obras pictóricas –un Goya y un Greco– para afrontar las dificultades económicas por las que atraviesa la entidad. El cuadro “Aníbal vencedor” de Goya se vendió finalmente por 3,3 millones de euros a la Asociación de Amigos del Prado. El Ministerio de Cultura abortó la operación para vender una Inmaculada Concepción de El Greco al museo de arte de Budapest. Este cuadro estaba expuesto este verano en La Quinta de El Pito.
El Consejo de Patrimonio tomó también otras decisiones ayer tarde. El pleno acordó iniciar los trámites para declarar BIC de carácter inmaterial la cultura del azabache y para incluir en el Inventario del Patrimonio Cultural la cetárea Sport de Luarca.
En la reunión, según se explica en la nota enviada por la Consejería de Cultura “se ha detallado la tramitación realizada desde comienzos de año por Cultura para documentar el conjunto patrimonial promovido por los hermanos Fortunato y Ezequiel de Selgas entre finales del siglo XIX y comienzos del XX en El Pitu (Cudillero) y se ha autorizado el inicio de los trámites para su declaración como BIC”. El Consejo de Patrimonio precisa que “el conjunto está integrado tanto por el complejo de La Quinta de los Selgas (compuesto por la gran casona, los pabellones de tapices e invitados y los jardines de estilo francés e inglés), así como por las escuelas, la iglesia de Jesús Nazareno y el cuartel de la Guardia Civil”, como por sus colecciones artísticas.
La consejera de Cultura, Berta Piñán, intervino ayer en el pleno de la Junta a preguntas del diputado de Foro Adrián Pumares. Piñán enumeró las actuaciones tomadas por su departamento para frenar la venta de los cuadros de los Selgas y apuntó que es clave determinar si las obras que puso a la venta la Fundación forman efectivamente parte de la dotación fundacional, a fin de determinar la legalidad de la operación. Piñán comparecerá mañana en la Junta a petición propia para detallar el asunto.
Los gestores de la Fundación Selgas rechazan que existan irregularidades
La Fundación Selgas-Fagalde ha respondido a la petición de información del Ministerio de Cultura negando que se produjera alguna ilegalidad en la inversión de 1,8 millones en la editorial Ecoprensa, que ahora está encabezada por el presidente de esta entidad, el abogado Gregorio Peña Varona. La Fundación indica que estas inversiones se hicieron en 2006 y 2007 y que entonces generaban “fuertes plusvalías”.
La Fundación reconoce que Peña Varona participó “personalmente” en la inversión en Ecoprensa pero que no representó a la Fundación. Matiza que la representación de la Fundación Selgas para invertir en Ecoprensa “la ostentó el Secretario, por lo que en modo alguno se puede sostener que se invierte en ninguna empresa del Presidente”.
Con respecto a la compra del hotel Sevilla Congresos, fuente principal de las pérdidas que llevaron a la Fundación tomar la decisión de vender sus joyas pictóricas, la Fundación explica que Peña Varona “no tenía ninguna participación en la sociedad vendedora, y la única relación era profesional al ser secretario del Consejo de Administración”. También precisa que la operación de compra fue aprobada por unanimidad en el patronato en 2006 por un precio máximo de 21 millones. Finalmente se adquirió por 20,4 millones. La Fundación Selgas explica al Ministerio que ese hotel ha generado a unas rentas de 18,7 millones de euros y, si no hubiera habido pandemia, “habrían sido” 19,8 millones de euros.
