En “Întregalde”, tres voluntarios están en su viaje humanitario habitual de fin de año. Contentos por poder ayudar a quienes más lo necesitan, se sienten cómodos y tranquilos hasta que ven a un anciano solitario que deambula solo por la carretera y que, tras subirse en su coche, queda atrapado con ellos en mitad del bosque, donde después se pierde. Con esta premisa busca el director del filme, el reputado Radu Muntean, mostrar el dilema moral de qué hacer cuando, para ayudar al prójimo, debes ponerte en peligro.
Muntean es ya un viejo conocido del Festival de Cine de Gijón –fue galardonado en 2010 por “Martes, después de Navidad”– y espera que con esta nueva película, que en el FICX hace su estreno nacional, el público no vea ningún atisbo de “burla” hacia el voluntariado: “Solo intento mostrar cómo ese ser generoso muchas veces nos motiva por nuestra propia satisfacción, y eso también está bien. No creo que exista un altruismo en un sentido puro y quería jugar con los prejuicios del público”. El filme toma como escenario un bosque perdido de Transilvania e incorpora en su reparto a varios locales, aunque se reserva los tres papeles protagonistas, los voluntarios, para actores profesionales: Maria Popistasu, Ilona Brezoianu, Alex Bogdan. “Los locales quería que los interpretasen gente de la zona porque entendía que serían imposibles de imitar, y tuve suerte de dar con gente muy buena, aunque también hubo recelos”. El rodaje, en plena pandemia, apenas se vio afectado por encontrarse en medio de la nada, en un bosque que para Muntean es un personaje más que encarna “lo desconocido”. Se proyectará por última vez hoy, a las 21.30, en la sala 12 de los cines Yelmo.
