Un total de 3,3 millones de dosis de la vacuna contra la covid-19 de Pfizer comenzarán a llegar a España durante diciembre (1,3 millones) y enero (2 millones) para vacunar a los niños de 5 a 11 años. Las primeras dosis estarán en nuestro país a partir del 13 de diciembre, según ha avanzado la ministra de Sanidad, Carolina Darias, que ya ha pedido a las comunidades que preparen las campañas de vacunación, unos dispositivos que algunas regiones comienzan a organizar con celeridad. Algunas comunidades, como Extremadura o Castilla-La Mancha, se plantean la inmunización en los centros escolares. Asociaciones de padres y sindicatos de profesores dan por imposible que el dispositivo para vacunar en los colegios pueda desplegarse en los centros antes de las vacaciones escolares de Navidad.

Estas dosis comenzarán a llegar a España a partir del 13 de diciembre y se van a repartir a las comunidades autónomas "de manera proporcional a la población infantil" que tenga cada una de ellas. La Comisión de Salud Pública se reunirá el próximo martes para analizar las recomendaciones de la Ponencia de Vacunas y, finalmente, tomar una decisión sobre la inmunización de los niños de entre 5 y 11 años. "Tenemos todo preparado y dispuesto si la Comisión de Salud Pública lo autoriza", ha afirmado Darias que ha recordado que serán los técnicos del ministerio y las comunidades quienes determinen los criterios para vacunar a estos menores.

Sin embargo, asociaciones de padres y sindicatos de profesores, admiten que será inviable vacunar a los niños antes de Navidad. Al menos en el entorno escolar, que es una posibilidad que, hasta hace unos días, contemplaban algunas comunidades como Andalucía que, sin embargo, este viernes, a través de su Consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, ha indicado que esa campaña se llevará a cabo "de forma preferente" en los centros de salud en horario de mañana y tarde, sábados incluidos, para facilitar que puedan ir acompañados de sus padres, que deberán aportar una autorización si no van con ellos.

Poco margen de maniobra

Los tiempos son muy ajustados para desplegar una campaña, precisan desde ANPE, sindicato mayoritario en el ámbito de la enseñanza pública. "Es muy ajustado, depende de si la administración tiene una buena organización. Pero los centros educativos apenas tienen margen de maniobra. Hay que informar a los padres, autorizar esa vacunación -si la inmunización es en los centros de salud o vacunódromos, como sucedió con los adolescentes, los menores deben ir acompañados de su tutor legal -llevar los puestos de administración a los centros, ver si llegan a todos...Van muy apurados y lo tienen muy complicado", señalan desde el sindicato.

Desde la Confederación Católica Nacional de Padres de Familia y padres de Alumnos (CONCAPA), su presidente, Pedro José Caballero, se queja a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, diario que pertenece a este grupo, Prensa Ibérica, de falta de información ya antes de esta inminente campaña. Pero, advierte, sería imposible semejante despliegue dentro de los centros escolares porque los plazos son muy cortos y los niños están a punto de comenzar sus vacaciones navideñas. Si las vacunas comienzan a llegar a España un 13 de diciembre y empiezan a distribuirse de forma proporcional entre las comunidades, el plazo hasta que acabe el colegio apenas se extiende durante poco más de una semana.

"No tenemos ninguna noticia. Hemos reclamado, por activa y por pasiva, esa información porque las familias somos las que primero debemos conocer, de primera mano, los beneficios de esa vacuna en nuestros niños, pero no tenemos ni idea de nada. Ni qué medidas sanitarias se van a tomar o cómo lo va a hacer cada comunidad autónoma", incide el presidente de una entidad que agrupa a 53 federaciones, presentes en unos 3.000 colegios y que representa a más de 3.5 millones de familias.

Desde CONCAPA consideran que vacunar a los niños en los propios colegios, trasladando a los centros a los equipos de enfermería, como ya planean algunas comunidades, es una buena idea, sobre todo, aclara su presidente, para no colapsar más los centros de salud con los pinchazos a los menores, pero no lo ven posible hasta, al menos, la reanudación de las clases.

"No nos parece mal que se haga en los colegios, siempre que se informe con antelación a las familias, porque sino puede ser un verdadero caos", se reafirma su presidente. ¿Y daría tiempo a organizar esa campaña de inmunización en los propios centros antes de las vacaciones de Navidad, que comienzan el próximo 22 de diciembre?. "Materialmente imposible. Hay que tener en cuenta que en apenas un par de semanas se van a sus casas y luego comienzan a dispersarse", añade el responsable nacional de la entidad.

Padres negacionistas

Trasladada la misma pregunta a la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnado (CEAPA), la respuesta es mucho más tibia: "No nos hemos pronunciado y vamos a seguir así. En el tema de la vacunación, la máxima autoridad es Sanidad y las consejerías. Lo harán como crean conveniente. Es un tema delicado y lo respetamos", indica la presidenta de esta entidad, Leticia Cardenal.

Sobre la posibilidad de que algunos padres rechacen inmunizar a sus hijos, el presidente de CONCAPA apunta que en todas partes "hay negacionistas", también en los colegios pero, precisa, "no podemos obligar a las familias a hacer algo que no es obligatorio". Lo que más le preocupa, repite es que, antes de cualquier inmunización a menores, en los centros se debe contar con el visto bueno de los padres y es ese aspecto el que puede generar más caos para una campaña que podría arrancar en días.

Pedro José Caballero vuelve a quejarse de la falta de información sobre la inmunización pediátrica para que, desde las asociaciones de padres, pudieran informarles tanto de sus beneficios como de sus efectos secundarios. Fuentes de ANPE, por su parte, precisan que los adultos "han respondido muy bien ante la vacunación" pero admiten que quizá, en el caso de los padres de menores, no se ha ofrecido "la información suficiente".