El teatro profesional asturiano, pese a la pandemia, registró el año pasado su récord histórico de funciones según los estudios anuales que Boni Ortiz lleva realizando los últimos 19 años. La región puso en escena 1.343 funciones de las que 955 eran de grupos asturianos y, de ellas, 758 de compañías de teatro profesionales. Ortiz, experto en teatro y autor del anuario que dio a conocer ayer en el marco de Feten, sí alertó, no obstante, de una tendencia más preocupante: el descenso de las funciones organizadas por grupos amateur. “Son clave para crear nuevo público y despertar la pasión por el teatro, así que es importante que no lo dejemos morir”, señaló.
Poniendo en contexto las cifras, en 2020, año del confinamiento, salieron a escena 907 funciones y en 2019, un año si restricciones, 1527, así que en número totales el año pasado ya se acercó bastante a la media prepandémica. Gijón lidera los rankings de programación con 329 funciones. Le sigue Oviedo, con 259, y Avilés, con 129. El teatro profesional sale ganando, y sus 758 funciones contrastan con las alrededor de 500 que solían presentar en su balance en años anteriores. Pero esta buena tendencia se compensa con lo que Ortiz tilda de “preocupante” descenso de las funciones de aficionados. En 2021 hubo solo 197 pases frente a las 470 del año 2019.
Según Ortiz, el repunte en funciones profesionales respondea que la danza está en plena expansión. El año pasado se programaron 87 funciones, 52 de ellas asturianas, aunque el experto todavía ve baja la cifra. Destacó que espacios como “Les Naves” en Gijón y la proliferación de cada vez más talleres y festivales de baile estén engrosando un nicho de mercado “con mucho potencial”.
El anuario de este año le dedica su portada a “Higiénico Papel”, una compañía teatral que cumple 25 años de vida sobre los escenarios.
