La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Leyes

En Tenerife, ni escupir en la calle ni tirar pipas al suelo

El Ayuntamiento sacará a exposición pública la nueva normativa municipal a partir de la próxima semana, que también prohíbe poner octavillas publicitarias en los coches

Basura depositada fuera de los contenedores de residuos, en Santa Cruz de Tenerife.

La nueva Ordenanza de Residuos y Limpieza de Santa Cruz de Tenerife saldrá a exposición pública a partir de la próxima semana. Así lo anuncia el edil de Servicios Públicos, Carlos Tarife (PP), quien indica que los vecinos, empresas y organizaciones tendrán 40 días para acceder, a través de la Plataforma de Participación Ciudadana, en la web www.santacruzdetenerife.es, al borrador de esta normativa, y para presentar alegaciones. Esta ordenanza, que sustituye a la aprobada en 2001, incluye nuevas prohibiciones, como las de escupir en la calle, tirar pipas al suelo, o colocar "octavillas" en los vehículos estacionados en la vía pública, además de la de fumar en las playas, tal y como ya lo adelantó El Día.

Asimismo, la nueva normativa municipal incorpora otras novedades, como el incremento de la cuantía de las sanciones; la creación de una nueva tasa para que se pague en función de los residuos que se generen; o la obligación para los grandes productores, como por ejemplo centros comerciales, hoteles, restaurantes, mercados, residencias de mayores, hospitales y colegios, de tener sus propios servicios de recogida de basura.

Tarife explica que esta ordenanza contiene la regulación específica en materia de gestión de residuos en el municipio, "pero también introduce normas claras que contribuyen a la consecución de unos espacios públicos saludables, agradables y atractivos, con el objetivo de favorecer la convivencia ciudadana y de que dichos espacios cumplan con unos estándares de calidad propios de una ciudad moderna y con vocación turística como es Santa Cruz".

En este sentido, y según se indica en la ordenanza, se refuerza el papel del personal del Consistorio dedicado a la actividad inspectora y se elevan las multas para los infractores, las cuales pueden llegar hasta los 3,5 millones de euros, multiplicando por casi 60 la cuantía máxima que recoge la actual norma, de 60.000 euros.

"La actividad de información y concienciación que debe llevarse a cabo desde el Ayuntamiento también debe ir acompañada de instrumentos coercitivos suficientes que permitan erradicar comportamientos del todo incompatibles con la convivencia ciudadana y la sostenibilidad de nuestro medio urbano y natural".

Objetivos.

Entre los objetivos que se persiguen con la aprobación de esta nueva normativa se encuentran la reducción, "al mínimo", de la generación de residuos, con especial atención al desperdicio alimentario y a los plásticos de un solo uso; la introducción de la actividad planificadora en la gestión municipal de residuos; la erradicación de la basura dispersa en los espacios públicos, "propiciando entornos urbanos y naturales limpios y saludables, con singular atención a los espacios especialmente protegidos y a las zonas de especial interés turístico"; y el fomento de la autogestión de los residuos y de la autofinanciación de los costes de su gestión.

Contenedores.

"Siempre que sea técnicamente posible y económicamente sostenible", los contenedores de residuos estarán ubicados a menos de 200 metros de cualquier vivienda, comercio o industria. El Ayuntamiento podrá obligar a los productores de residuos a la adquisición de su propia contenerización de uso exclusivo. En este caso, corresponderá al productor el mantenimiento, lavado y reposición del contenedor.

Obligaciones.

Las "personas usuarias" del servicio de recogida de basura están obligadas a separar correctamente los residuos en origen (hogar, comercio o industria) de acuerdo con las diferentes tipologías de recogidas separadas implantadas por el Consistorio capitalino; a cumplir con los horarios de depósito en los contenedores y entrega de residuos establecidos; a disponer en los hogares, comercios e industrias de zonas habilitadas para el correcto almacenamiento de los residuos; a depositar la basura en los contenedores habilitados para esa fracción de residuos, y a abstenerse de depositar la basura en la vía pública cuando los contenedores estén llenos, entre otras obligaciones.

Tasa.

El Ayuntamiento de Santa Cruz establecerá una tasa o, en su caso, una prestación patrimonial de carácter público "no tributaria, específica, diferenciada y no deficitaria, que permita implantar sistemas de pago por generación de residuos y que refleje el coste real, directo o indirecto, de las operaciones de recogida, transporte y tratamiento de la basura". En lo que respecta a la reducción del residuo alimentario en las empresas de distribución alimentaria y de restauración, la Corporación local establecerá, en las correspondientes ordenanzas sobre la financiación de los servicios de recogida de basura, bonificaciones en las tasas o, en su caso, en las prestaciones patrimoniales de carácter público no tributario que graven la prestación de dichos servicios de recogida.

Prohibiciones.

Entre las nuevas prohibiciones que incluye esta ordenanza se encuentran las de "tirar en los espacios públicos toda clase de artículos masticables y sus envoltorios", específicamente los chicles, caramelos, pipas y otros similares; "defecar, miccionar y escupir en los espacios públicos»; arrojar cualquier tipo de residuos desde ventanas, terrazas o balcones, así como el "sacudido de alfombras, prendas o similares"; arrojar a la vía pública toda clase de octavillas, panfletos o materiales publicitarios similares, prohibiéndose de "forma expresa la colocación de octavillas o similares en los vehículos aparcados en la vía pública"; depositar residuos por fuera de los contenedores o en cualquier otro espacio público; depositar "animales muertos o restos de los mismos en los contenedores de residuos, así como abandonarlos en cualquier espacio público", y la extracción o "rebusca" de basura en contenedores o en papeleras.

Fumar en las playas.

La nueva ordenanza de residuos prohíbe, por primera vez, fumar en todas las playas del municipio, "salvo en las zonas especialmente habilitadas por el Ayuntamiento".

Infracciones muy graves.

Con respecto a las infracciones relacionadas con la gestión de residuos, las sanciones oscilarán entre los 100.000 y los 3,5 millones de euros en el caso de que los incumplimientos sean "muy graves". Entre estos se encuentran, por ejemplo, el abandono de residuos que pongan en peligro grave la salud de las personas, se haya producido un daño para el medio ambiente o cuando se haya producido en espacios protegidos. En materia de limpieza, las sanciones pueden llegar hasta los 3.000 euros. Entre estas infracciones se encuentra el deterioro grave de equipamientos o elementos del servicio público.

Infracciones graves.

Para las infracciones graves relacionadas con la gestión de residuos, las cuantías de las multas se sitúan entre los 2.000 y los 100.000 euros. Si se trata de residuos peligrosos o suelos contaminantes, la sanción se situará entre los 20.000 y los 600.000 euros. Entre las infracciones que se considerarán graves se encuentran el incumplimiento de la obligación de separación de residuos en origen, en el interior de los establecimientos y eventos públicos, y la extracción o rebusca de basura. En materia de limpieza, las multas pueden llegar hasta los 1.500 euros. Entre estas infracciones destaca el hecho de no recoger de los espacios públicos los excrementos de animales.

Infracciones leves.

Las multas para las infracciones leves relacionadas con la gestión de residuos pueden llegar hasta los 2.000 euros, y si se trata de residuos peligrosos o suelos contaminantes, hasta los 20.000 euros. Entre estas se encuentran depositar los residuos sin separarlos por fracciones o en contenedores que no corresponden, o incumplir los horarios de depósito y entrega de residuos. En materia de limpieza, las sanciones pueden llegar hasta los 1.500 euros. Entre las infracciones leves se encuentran escupir en la calle, tirar pipas al suelo o fumar en las playas del municipio.

Compartir el artículo

stats