El Principado propondrá que el investigador de la Universidad de Oviedo, Carlos López-Otín, sea nombrado hijo adoptivo de Asturias. Así lo anunciaba ayer el presidente regional, Adrián Barbón, durante una visita a Lugones. Barbón explicó que el reconocimiento es de justicia porque “tenemos que darle las gracias, Asturias debe darle las gracias”.

La decisión del Gobierno se enmarca dentro de la campaña de aliento al catedrático de Biología Molecular, instigada tras las últimas informaciones que han trascendido sobre el expediente que se instruye en la Universidad de Oviedo contra algunos de los supuestos autores de la campaña de desprestigio que, durante meses, sufrió Otín, su equipo investigador y su entorno más cercano. Expediente con el que la Universidad de Oviedo quiere acabar con los años de silencio en torno a lo ocurrido, incluida la falta de respuesta a la muerte de la mayoría de los ratones del bioterio de la Universidad de Oviedo, que era una pieza angular de las investigaciones del equipo de Otín.

Igual que hicieron algunos miembros de la Universidad en el último claustro, compañeros, amigos y discípulos de Otín, ahora el presidente del Principado se refiere también a la importancia de reconocer públicamente su aportación a la ciencia y a Asturias. Precisamente la ley reguladora de los Honores y Distinciones de Asturias está recién modificada para, tras 30 años de su publicación, introducirle algunas novedades. La primera, para que los distinguidos tengan el tratamiento de ilustrísimos; también para anular las dos categorías en las que se diferenciaba la concesión de medalla de Asturias, de oro y plata, y que ahora se unifican en una sola y con cinco beneficiarios como máximo al año; y una tercera, para que los títulos de Hijo Predilecto e Hijo Adoptivo de Asturias puedan concederse tras el fallecimiento a víctimas del franquismo.

Honores para tres luchadores antifranquistas

La Consejería de Presidencia elevará en un plazo breve al Consejo de Gobierno la propuesta de conceder los títulos de Hijo Predilecto de Asturias a tres luchadores antifranquistas que, sin la modificación del reglamento, no podían recibir la distinción. Son José Antonio Alonso Alcalde, Felipe Matarranz y Cristino García Granda. Alonso Alcalde, conocido como comandante Robert, falleció en Francia en 2015, un año después de haber recibido la Orden del Mérito Nacional de ese país por su heroico papel en la liberación de la ciudad de Foix. En Colombres murió hace siete años, Felipe Matarranz, “comandante Lobo”, encarcelado en varias ocasiones y quien durante años trabajó en la clandestinidad para el PCE. Cristino García Granda fue fusilado en 1946 tras haber vivido el exilio, haber formado parte de la Resistencia francesa y ser reconocido como “Héroe Nacional de Francia”.

José Antonio Alonso, Comandante Robert.

Felipe Matarranz, Comandante Lobo.

Cristino García Granda.

Cristino García Granda.