Alberto Marcos Vallaure, exrector de la Universidad de Oviedo y exdecano de la Facultad de Geología, falleció ayer en Oviedo a los 78 años de edad. Uno de los geólogos más prestigiosos de la región, dirigió la institución académica desde 1984 a 1988, en pleno proceso de modernización de la Universidad española, en sustitución del jurista Teodoro López-Cuesta.

Su vida estuvo durante más de cinco décadas ligada a la Universidad de Oviedo, primero como estudiante de Geología en el periodo 1962-1967; después como profesor (1966-1984), catedrático (1984-2014) y profesor emérito (2015-2017). Como consecuencia de su compromiso con el progreso universitario se presentó a las primeras elecciones democráticas a Rector. El 27 de febrero de 1984, Alberto Marcos Vallaure se impuso por 24 votos de ventaja al que fue su antecesor, Teodoro López-Cuesta, catedrático de Derecho. A su cargo quedó la puesta en marcha en la Universidad asturiana las previsiones de la Ley Orgánica de Reforma Universitaria de 1983 (LRU).

El actual rector de la Universidad de Oviedo, Ignacio Villaverde, trasladó ayer a la familia, en nombre de la comunidad universitaria, el enorme pesar por la pérdida de geólogo, al que calificó como un universitario «ejemplar», y un rector que fue «referencia indiscutible de liderazgo y cercanía». «Él asumió los cambios trascendentales que tuvo que hacer la universidad asturiana tras la entrada en vigor de la LRU. Su fallecimiento deja un enorme vacío que solo apenas puede llenar el recuerdo de su talla humana y académica», subrayó.

Fotografía tomada el 2 de junio de 1984 de algunos de los asistentes a la inauguración del Museo Etnográfico de Grandas de Salime. Detrás: José Feito, Álvaro Ruiz de la Peña, Francisco Quirós, Armando Graña, José Azcárate, Juaco López, José Naveiras y Emilio Marcos. Delante: Francisco Manzanares, José Antonio Castañón, Ignacio Ruiz de la Peña, Alberto Marcos y Javier A. Pulgar. | LNE / NACHO OREJAS / MIKI LÓPEZ / IRMA COLLÍN

Marcos Vallaure fue el primer geólogo que accedió al rectorado y el cuarto rector precedente de la Facultad de Ciencias desde su creación en 1857. Tenía 40 años recién cumplidos pero ya sumaba una destacada experiencia de gestión: había sido vicedecano de la Facultad de Ciencias y primer decano de la de Geología, recién creada. Según relatan Francisco Javier Álvarez Pulgar y Fernando Bastida Ibáñez en un artículo sobre Alberto Marcos Vallaure publicado en la revista «Trabajos de Geología» en 2016: «Asumió el cargo de rector como un deber, como una obligación de coherencia personal. Fue el rector que nunca quiso serlo. Se puede decir que lo fue por la voluntad de los demás, libremente asumida por coherencia y responsabilidad, más que por propia decisión o deseo».

Homenaje a Teodoro López Cuesta en el Paraninfo de la Universidad. Por la izquierda: Juan Velarde Fuertes, López Cuesta, Alberto Marcos Vallaure, Enrique Fuentes Quintana y Gonzalo Anes. | LNE / NACHO OREJAS / MIKI LÓPEZ / IRMA COLLÍN

«Su rectorado fue muy denso, hizo la transición de la Universidad a la modernidad, desde aquella universidad franquista, de ‘antiguo régimen’. Fue un buen gestor, un rector brillante, que además tuvo un detalle que fue el de no querer presentarse a un segundo mandato. Y como persona, era cercano y accesible, un buen tipo, con mucho sentido del humor», recuerda Ramón Rodríguez, exdirector de la Biblioteca de la Universidad y director del Real Instituto de Estudios Asturianos (RIDEA).

Alberto Marcos Vallaure, con Efim Zelmanov y Walter Álvarez, cuando los nombraron doctores honoris causa en 2011. | LNE / NACHO OREJAS / MIKI LÓPEZ / IRMA COLLÍN

Durante el mandato de Marcos Vallaure se aprobaron los nuevos estatutos de la Universidad de Oviedo, por mayoría absoluta, que suponían un profundo cambio en la estructura, con una apuesta clara por un nuevo modelo organizativo basado en los departamentos. A su equipo le tocó elaborar la primera plantilla de personal, los primeros presupuestos independientes del Ministerio de Educación, y el primer plan de ordenación del campus. Su mandato, con momentos de enorme resistencia de sectores anclados en el pasado, acabó cuatro años después, aunque Marcos Vallaure no abandono del todo la política universitaria, ya que fue vocal del Consejo Escolar del Estado y del Consejo de Universidades por designación de las Cortes Generales.

«Perdemos a un referente en la historia de la Universidad de Oviedo. Supo guiar a la institución académica en una etapa fundamental, con la implantación de la LRU y la adaptación de las universidades a un nuevo periodo de apertura y modernización. Consiguió romper inercias y sentar las bases de una Universidad de Oviedo que comenzaba a despuntar y atraer grupos de investigación y talento». señalaba ayer Borja Sánchez, consejero de Ciencia, Innovación y Universidad, al tiempo que el presidente del Principado, Adrián Barbón, transmitía su pésame a la familia vía Twitter.

Paz de Andrés saluda a Alberto Marcos Vallaure durante el homenaje que le tributaron en 2013. 05.-Toma de posesión de Ignacio Villaverde como rector, en el patio del edificio histórico. Desde la izquierda, Vicente Gotor, Alberto Marcos Vallaure, Adrián Barbón, Ignacio Villaverde, Juan Vázquez, Santiago García Granda y Juan Sebastián López-Arranz. | LNE / NACHO OREJAS / MIKI LÓPEZ / IRMA COLLÍN

En una entrevista concedida a LA NUEVA ESPAÑA en septiembre de 2007, Marcos Vallaure hacía memoria de su paso por el rectorado, en una época en que la Universidad de Oviedo superaba los 40.000 estudiantes «con unos presupuestos insuficientes». Tan es así, que el catedrático de la Facultad de Geología manifestó entonces que «yo iba a pedirle limosna al Principado y Pedro de Silva me respondía que la Universidad aún no estaba transferida. Iba a Madrid, y en el Ministerio de Educación me decían que todo el dinero previsto para Asturias se lo llevaba Hunosa».

«Fue el rector que pilotó la ley de reforma universitaria en momentos muy difíciles, creando el módulo departamental que hoy todavía continúa. Por otra parte cuando se le nombró profesor emérito en la época de mi rectorado me llamó la atención cuando estuvo en mi despacho que me dijo y por el no se jubilaría nunca que quería seguir con su trabajo en la Geología. Una gran perdida inesperada para la Universidad», señala el exrector Vicente Gotor. «La institución ha perdido un gran universitario y una gran persona. A nivel personal he perdido a un gran compañero y un estupendo amigo», añadió Juan López-Arranz.

Una vida dedicada a la Universidad

Otro exrector, Juan Vázquez, ofrece un retrato muy personal de Alberto Marcos Vallaure: «He tenido siempre una relación estupenda con él, era un tío fino intelectualmente y cariñoso en lo personal. Inicia un ciclo para mí también porque me sentía muy unido a aquella generación, la de los llamados ‘penenes’, que eran profesores de base, que acabábamos de llegar con mucho empuje y fuerza». Santiago García Granda, rector entre 2016 y 2021, añade que: «Representó un cambio en la Universidad de Oviedo. Hizo los primeros estatutos democráticos, le pasó algo parecido a mí que fue no renovar un segundo mandato y ese cambio que había hecho se truncó, pero era muy respetado en su facultad y en toda la Universidad. Tenía una idea muy reivindicativa porque creía que el apoyo de la sociedad asturiana no era el suficiente para la Universidad. Era entrañable, muy afable y genuinamente asturiano».

Su regreso al mundo científico tras el paréntesis rectoral y a la docencia marcaron lo últimos años de su vida profesional, destacando entre discípulos y coladoradores con su «liderazgo amable» y su capacidad para escuchar y dialogar. Fue, de alguna manera, «uno de los últimos exponentes de la vieja clase de los de los grandes maestros universitarios». Coincidiendo con su jubilación, la Facultad de Geología dio el nombre de Alberto Marcos Vallaure a su aula principal. «Es una pérdida terrible para la Universidad. Él llevó a la Universidad de Oviedo desde el siglo XIX hasta el XXI durante su mandato como rector, fue una etapa brillante que completó con mucho esfuerzo y un gran sacrificio. Yo pierdo a una figura que era como un padre, era un maestro y un mentor, con un compromiso único», señalaba ayer su discípulo Francisco Javier Álvarez Pulgar, Profesor Emérito Honorífico de Geología, al que la noticia del fallecimiento de Alberto Marcos Vallaure cogió en Francia, desde donde confiaba en retornar hoy para arropar a la familia.

Casado con Begoña Fernández Moreno, era hermano del exdirector de Museo de Bellas Artes de Asturias, Emilio Marcos Vallaure, y de Consuelo Marcos Vallaure, que fue concejala del Ayuntamiento de Oviedo. Alberto Marcos Vallaure era padre de tres hijos, Francisco, Naranco y Alberto, que le habían dado cinco nietos. El rito exequial de despedida de cuerpo presente se celebrará hoy, a las seis menos cuarto de la tarde, en la capilla del tanatorio de Los Arenales, en Oviedo. A continuación, los restos mortales del exrector serán incinerados en la intimidad familiar.