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In memoriam

"Querido Alberto, querido rector Vallaure", por Ignacio Villaverde, máximo responsable de la Universidad de Oviedo

El catedrático de Geología, Marcos Vallaure, despedido esta tarde en el Tanatorio de los Arenales, es recordado por el actual rector: "Su figura se erguía sobre todos; por su altura, su porte, su elocuencia y su persuasión"

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Último adiós a Alberto Marcos Vallaure en Oviedo Luisma Murias

Hay llamadas que te hieren el alma. Este lunes recibí una de esas llamadas. Esas llamadas que te abofetean y te dejan varios minutos abandonado en un revuelo de pensamientos confusos, de imágenes que se entremezclan, de una tristeza sorda… y, sobre todo, un profundo sentimiento de orfandad. Alberto Marcos Vallaure, mi rector, había fallecido.

Una de esas imágenes fue el día, siendo yo un estudiante de Derecho en el viejo Caserón de San Francisco, en el que los delegados de la facultad nos reunimos con él y con la por entonces secretaria general de la universidad, Paz Andrés. Lo hicimos en el que era su despacho, que hoy se emplea solo para visitas y actos oficiales.

No olvidaré la profundidad de su voz, la atención con la que escuchaba nuestras ideas y su empatía con unos chicos y chicas que queríamos cambiar el mundo

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No olvidaré la profundidad de su voz, la atención con la que escuchaba nuestras ideas y su empatía con unos chicos y chicas que apenas llevábamos dos cursos en la universidad y queríamos cambiar el mundo. Él ya estaba en esa tarea, él, sin un ápice de arrogancia o condescendencia, ya estaba cambiando el mundo, cambiando nuestra universidad. Tampoco puedo olvidar el momento en el que se votaron en el claustro los nuevos estatutos de la Universidad de Oviedo. Le recuerdo paciente, conciliador, pero también firme en sus convicciones frente a los que se empeñaban en que todo siguiese igual. Su figura se erguía sobre todos, no solo por su altura y porte elegante y medido, sino también por su elocuencia y persuasión exponiendo sus ideas.

Le recuerdo paciente, conciliador, pero también firme en sus convicciones frente a los que se empeñaban en que todo siguiese igual

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Nuestro rector, Alberto Marcos, no tuvo ninguna duda en que su deber era dar un paso al frente. Aparcar durante un tiempo su intensa y brillante carrera académica y dedicarle unos años a su alma mater. Hombre de una honestidad inigualable y de una generosidad sin parangón. Un rector que asumió la tarea titánica de transformar la universidad en tiempos muy difíciles, elevado sobre los hombros de una generación (aquellos “penenes”) y tantos otros, que tenía hambre de cambio y de una nueva universidad que se sacudiese de encima los años de plomo. Creo que no hemos reconocido debidamente esa tarea.

Asumió la tarea titánica de transformar la universidad en tiempos muy difíciles; creo que no hemos reconocido debidamente esa tarea

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Como escribieron dos de sus discípulos, grandes universitarios también, Javier Pulgar y Fernando Bastida, Alberto fue un rector que no quiso serlo, que lo fue y que, aprobados los estatutos, se sometió de nuevo al voto de la comunidad universitaria y que, cuando los desencuentros le hirieron, decidió que era el momento de marcharse. Él ya había cumplido su misión.

Hoy la Universidad de Oviedo está de luto. Nos ha dejado uno de nuestros grandes rectores. Sentimos una enorme orfandad porque deja un inmenso vacío, el que solo los mejores pueden dejar en nuestras almas y vidas. Pero sé que sigues con nosotros, porque lo estás en cada lugar en el que brilla la universidad de la que tú pusiste los sólidos cimientos que la han hecho un referente.

Tras la despedida de hoy martes, capilla ardiente hasta el viernes en el Edificio Histórico

La familia y amigos de Alberto Marcos Vallaure, fallecido a los 78 años, le despidieron esta tarde en el tanatorio de los Arenales, entre evidentes muestras de consternación. Hombre muy respetado y querido, en estos dos días se han sucedido las declaraciones de quienes le consideraron un "maestro" y un gran impulsor de la Geología en la región.

La Universidad de Oviedo va rendir su propio homenaje a Alberto Marcos Vallaure. Así, desde mañana y hasta el viernes, el Paraninfo del Edificio Histórico acogerá una capilla ardiente en honor al que fuera su rector. Además, las banderas de la Universidad de Oviedo ondearán a media asta como señal de duelo. 

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