La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Naufragios

La BBC apunta a los enredos del 'Villa de Pitanxo'

La cadena pública británica elabora un reportaje sobre las posibles causas del siniestro y el estado de la investigación con la colaboración de familiares y de Faro de Vigo

Bruno Boelpaep entrevista a Kevin González, hijo de uno de los marineros fallecidos en el naufragio del 'Villa de Pitanxo'. SANTOS ÁLVAREZ

La dimensión de la tragedia del pesquero 'Villa de Pitanxo', naufragado el 15 de febrero a unas 300 millas de la costa de Canadá, trascendió todas las barreras. Como la de la historia –no se había producido un siniestro semejante desde 1978, con el accidente del Marbel junto a las Cíes– o de la parsimonia judicial: cuatro meses después, la justicia ha decidido que tanto el patrón como la armadora, Pesquerías Nores, sean investigados por veintiún homicidios por imprudencia grave, contra los derechos de los trabajadores, falsedad documental y encubrimiento. Y el primero, José Enrique Padín, ha tenido que entregar su pasaporte y debe comparecer cada quince días en un juzgado. La barrera que no había traspasado es la de la notoriedad internacional. En los primeros días, la noticia sí fue portada en los principales medios de comunicación de todo el mundo, una trascendencia que se fue apagando. Hasta ahora, que la prestigiosa BBC ha decidido elaborar un reportaje sobre el agujero negro de la tragedia.

La dirección de la cadena pública británica, desde Londres, ha enviado a Galicia a uno de sus principales reporteros en Europa, Bruno Boelpaep, para poner el foco no solo sobre el propio accidente y sus causas, sino también sobre las condiciones de vida a bordo, que reflejó Faro de Vigo en el reportaje 'Furia, frío y miedo en la última del Pitanxo'. Boelpaep, que acaba de regresar de cubrir la invasión de Ucraniaacudió a la sede de este periódico para entrevistar a la periodista que firma este reportaje, dada la extensa cobertura realizada por el Decano desde el mismo 15 de febrero, cuando avanzó en su edición digital una información que sobrecogió a todo el país.

Kevin González, con el periodista Bruno Boelpaep. SANTOS ÁLVAREZ

Pero han sido los familiares de los fallecidos –12 cuerpos no han aparecido– los protagonistas, y los artífices principales, una vez más, de mantener encendida la llama de la atención sobre este caso. Se han desplazado allá donde han querido escucharlos, en su demanda por una investigación plena y para que se organice una misión que permita bajar al pecio, que yace a hasta 1.000 metros bajo el mar. Bruno Boelpaep acudió, por ejemplo, a Moaña, donde mantuvo una extensa charla con uno de los dos hijos de Fernando GonzálezKevin. Su padre, engrasador en el pesquero de Marín, es uno de los que el mar no ha devuelto. El reportero belga también conversó con María José de Pazo, hija del jefe de máquinas del Pitanxo, Francisco de Pazo, y portavoz de las familias.

La investigación prosigue de momento en manos del magistrado Ismael Moreno, titular del juzgado de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional, ya que todavía no ha decidido plantear una cuestión de competencia. Suya será la decisión, previsiblemente, de aceptar o no a trámite la nueva querella que los familiares presentarán contra el sobrino de Padín, Eduardo Rial, y que no prosperó la primera vez. El patrón ya ha tenido que acudir al juzgado de Cangas, donde es residente, para cumplir el mandato judicial. Además de por causar la escora fatal del pesquero, las familias le han señalado por las precarias condiciones a bordoComo pudo reflejar Faro de Vigo, los tripulantes se quejaban a los suyos de la negativa a encender la calefacción, de no contar con mantas, del hacinamiento en algunos camarotes o del trato vejatorio recibido por Padín.

La armadora, a través de un comunicado, ha asegurado que tiene todo el interés en esclarecer las causas del naufragio, y ha reprobado el tratamiento informativo.

Compartir el artículo

stats