El médico Jesús Candel, más conocido como "Spiriman", murió ayer a los 46 años tras no superar el cáncer de pulmón que padecía desde 2020. El profesional granadino fue un activista de la sanidad pública. Lideró la lucha contra los recortes en Andalucía y coordinó la Unidad de Apoyo al Paciente Oncológico (UAPO). Sin embargo, se hizo famoso en las redes sociales por sus vídeos y explicaciones sobre el covid y la pandemia, junto con sus contundentes discursos sanitarios y reflexiones sobre su vida.
Las intervenciones de "Spiriman" fueron subiendo de tono hasta caer en los insultos. En 2019 se sentó en el banquillo por un delito de injurias contra el fiscal jefe de Granada. Y también fue posteriormente juzgado y condenado por el mismo delito contra la expresidenta de Andalucía, Susana Díaz, y altos cargos de Salud. Sus declaraciones en relación con el covid y, más tarde, con el cáncer, lo catapultaron a la fama digital. Sus vídeos sumaban miles de reproducciones. "El que se quiere curar de cáncer se cura y el que no, se muere", afirmó tras ser diagnosticado. Sus polémicos mensajes no pasaron inadvertidos por Twitter, que le suspendió la cuenta temporalmente. El médico llegó a afirmar que sufría cáncer por el "estrés crónico" de sus años de lucha por la sanidad.
