En Las Vegas se multiplican estos días las fiestas donde la música latina es la protagonista. Todas van de la mano de la Academia Latina de Grabación que en la madrugada de hoy tiene su gran cita, con la entrega sus premios Grammy, los Oscar de la música en español y portugués, a los músicos más aclamados este año.
En la víspera de esa gran gala –pero con el mismo mérito y la misma estatuilla–, se otorgaban los considerados como "premios especiales" de cada edición, uno de los cuales ha reconocido la incuestionable y exitosa dedicación del ovetense Manolo Díaz. Para muchos, el broche de oro que merecía un apasionado de la música que ha ayudado a su engrandecimiento desde todos los ángulos: como músico, compositor, productor, ejecutivo de discográficas y, como guinda, lanzando proyectos de la propia Academia –de la que fue el primer presidente de su consejo de Administración–.
"Participó activamente en la ola del rock español en los 60, primero como guitarrista de ‘Los Sonor’ y luego como compositor y productor de éxitos para ‘Los Bravos’ y ‘Aguaviva’. Durante los años 70, Díaz hizo la transición a una respetada carrera como ejecutivo de la música con CBS, Sony, IFPI y UMG, donde trabajó de cerca con destacados artistas como Julio y Enrique Iglesias, Raffaella Carrá, Juanes y Carlos Vives, entre otros muchos", se ha recordado desde la Academia. Para añadir, además, que "después de una larga carrera en la industria de la música, Manolo Díaz volcó su experiencia como cantautor con conciencia social y ejecutivo de disqueras a su rol como vicepresidente y ahora miembro del Consejo Directivo de la Fundación Cultural Latin Grammy, donde sirvió durante más de siete años" hasta su jubilación, con 80 años, ocurrida en el 2021.
Y pese a todos esos méritos, el asturiano, que vive a caballo entre Miami, Madrid y Luanco, recogió su estatuilla asegurando que para él había sido "toda una sorpresa", porque él se crio humildemente "en una casa sin jardín" y "nunca hubiera esperado" alcanzar un éxito tan notable.
Para aplaudirle como merece, además de muchos de los compañeros y artistas con los que trabajó durante años, viajaron hasta Las Vegas miembros de su familia asturiana que mostraban su enorme orgullo por el reconocimiento. "Ha sido un honor y un privilegio compartir este momento con él. Manolo ha sido un personaje clave para la música en español y este reconocimiento a toda su carrera es un broche de oro. Mucha emoción", escribía tras el acto su sobrina Belén Carreño.
El premio "especial" de Manolo Díaz, que otorga el Consejo Directivo de la Academia Latina, lo recibió en el escenario de las manos de Gabriel Abaroa, presidente emérito de la Academia Latina de la Grabación, –que según los presentes hizo un emocionado y divertido repaso de méritos de Díaz– y de Carlos Vives, amigo personal del asturiano.
Además, otros premiados de la noche fueron –en la categoría de "Excelencia musical"– para Rosario Flores, que se mostró tremendamente expresiva en el escenario: "Vivo y respiro por el duende, bendito sea. Este es el resultado de la dedicación musical de toda una vida". También se galardonó a la argentina Amanda Miguel, el cantautor italo-venezolano Yordano y la icono brasileña del rock Rita Lee. El saxofonista cubano Paquito D’Rivera y el bajista mexicano-americano Abraham Laboriel fueron, junto con Manolo Díaz, los que se llevaron el Premio del Consejo Directivo.
La entrega de los premios honoríficos no fue el único acto que se adelantó a la cita central de la 65ª edición de la gran fiesta de la música hispana organizada por la Academia Latina de la Grabación. También ayer tuvo lugar la fiesta de homenaje al cantautor mexicano Marco Antonio Solís, que recibió el premio "Persona del Año de los Latin Grammy 2022" en una ceremonia celebrada también en Las Vegas, en el Michelob ULTRA Arena, con actuaciones de Sebastián Yatra, Ana Torroja, Laura Pausini o Fito Páez entre otros.
