La ministra de IgualdadIrene Montero, ha anunciado este lunes que el PSOE le ha comunicado que no tiene intención de retirar la enmienda a la 'ley transque exige que los menores de 12 a 16 años necesiten de aval judicial para poder cambiar de sexo y nombre en el Registro Civil y el DNI, una exigencia que el texto emanado del Gobierno contempla únicamente para las personas de entre 12 y 14 años. La enmienda recorta, por tanto, la autodeterminación de género en los menores de 16 años pese a que una de las principales reivindicaciones del colectivo LGTBI es que nadie, ni un juez, ni un médico, tenga que dar autorización para que en el DNI figure el sexo sentido. En la actualidad, se exigen dos años de hormonación y aval médico.

La decisión de los socialistas llega después de que el Ministerio de Igualdad esté siendo muy cuestionado por las rebajas de penas que está provocando la entrada en vigor de la 'ley sí es sí' y se sustenta en el deseo del PSOE de "reforzar las garantías jurídicas" de la ley trans, que fue el principal argumentó que usó el principal partido en el Gobierno cuando presentó, a finales de octubre, sus enmiendas. Desde entonces, Unidas Podemos ha trabajado para que la parte que afecta a los menores sea retirada y se vuelva al texto que se acordó en el Gobierno, pero no va a ser así y la enmienda llegará viva hasta el debate en la ponencia del Congreso, según ha denunciado Montero.

La decisión de los socialistas supone un nuevo choque con su socio de Gobierno, que está "preocupado" ante la posibilidad de que el PP apoye la enmienda socialista y, por tanto, la ley trans salga adelante con un "recorte en los derechos de las infancias trans". "Estoy preocupada pero todavía tenemos horas por delante para recuperar el acuerdo de Gobierno porque como Estado estamos obligados a no defraudar a las personas trans", ha manifestado la ministra en una entrevista en TVE, en la que ha asegurado que "se dejará la piel" en buscar el acuerdo.

Poco después, la vicesecretaria general del PSOE y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha rechazado que haya algún tipo de negociación con el PP sobre esta enmienda. “No sabemos lo que hará el PP”, ha señalado Montero, antes de criticar al jefe de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, por no tener "proyecto de país" y ser un "líder fallido". 

La número dos de los socialistas, en cualquier caso, ha insistido en que su partido no se plantea cambiar de posición sobre la 'ley trans'. “Hay que reforzar la seguridad jurídica de los menores. No se trata de posiciones inmovilistas, sino del interés general. Los menores son un colectivo muy sensible a proteger”, ha explicado Montero. 

Las críticas

La 'ley trans' está siendo muy cuestionada tanto por la derecha como por una parte del feminismo y de dirigentes históricas del PSOE que consideran que "borra a las mujeres" al hacer pilotar el sexo de una persona en la identidad de género, sin pruebas de que esta persona viva una situación estable de transexualidad.

Sus reproches se centran sobre todo en que la ley permita la autodeterminación de género a partir de los 16 años y entre los 14 y los 16 años asistidos por sus padres pero sin más requisitos. A estos reparos se ha sumado buena parte del colectivo médico que considera que los menores deberían presentar ante el Registro Civil un "diagnóstico médico multidisciplinar" de disforia de género para "disminuir el riesgo de no persistencia en el deseo de transexualidad" en algunos adolescentes y "los riesgos psicológicos y orgánicos derivados de un proceso acelerado de la transición de género".

Las movilizaciones

Frente a estas posiciones, el colectivo LGTBI asegura que muchos menores tienen muy claro que son trans desde edades muy tempranas y que exigirles acudir a la justicia para obtener su aval y que figure en el DNI su sexo sentido, como quiere el PSOE, es una discriminación hacia estas personas que, dado que son menores, son aún más vulnerables.

"Se trata de menores que sufren día a día por tener que vivir en un país que, aunque presume de ser pionero en derechos LGTBI+, les niega, les cuestiona, invalida su voluntad y les expone a numerosas violencias amparadas por una ley vigente que, en contra de lo que ya reconoció la OMS y nuestro propio Constitucional, sigue considerándolas personas enfermas mentales, y susceptibles de pasar por la jurisprudencia para poder ser”, ha denunciado tras conocer la decisión del PSOE Ana Valenzuela, presidenta de Chrysallis, Asociación de Familias de Infancia y Juventud Trans.

El colectivo LGTBI ha anunciado que impulsará movilizaciones en contra "de los recortes en derechos que pretenden imponer" los socialistas.