Cortés y Scorsese, una amistad de cine que se fabricó en La Vega

El director cierra en Oviedo el programa "Ventanas improvisadas" y evoca su encuentro, "muy especial", con el creador neoyorquino

Rodrigo Cortés, durante el encuentro celebrado en el teatro Filarmónica. | Mercedes Blanco

Rodrigo Cortés, durante el encuentro celebrado en el teatro Filarmónica. | Mercedes Blanco / T. Pertierra

Tino Pertierra

Tino Pertierra

Asturias proyecta buenos recuerdos en el cineasta y escritor Rodrigo Cortés, encargado de cerrar ayer la primera etapa del programa "Ventanas improvisadas" en el teatro Filarmónica de Oviedo. Aquí protagonizó intensas conversaciones con Francis Ford Coppola (teatro Jovellanos, 2015) y Martin Scorsese (Fábrica de La Vega, 2020) durante la Semana de los Premios "Princesa de Asturias". Del segundo encuentro nació una relación de amistad y camaradería que aún perdura. Scorsese, la razón por la que Cortés quiso hacer cine, salió de su casa durante la pandemia para ver "El amor en su lugar", última película de Cortés.

Antes de responder a las preguntas en el escenario de Violeta Dávila y Patricia Villalobos, fundadoras de "Cooltural Plans", el director de "Enterrado", que ha publicado recientemente el diccionario satírico, humorístico y poético "Verbolario" y el año pasado se ganó a los lectores con la novela "Los años extraordinarios" atendió a LA NUEVA ESPAÑA. Recordó que fue Scorsese la primera persona que vio el montaje "El amor en su lugar": "Se lo enviamos a Nueva York en mitad del confinamiento y lo primero que hizo al salir, no por impaciencia sino porque coincidió, fue ir a la sala de proyección. Para mí es mi dios pagano desde que con 13 años estaba en la cola de unos cines en Salamanca para ver ‘El color del dinero’. Nunca imaginé que el círculo iba a dar la vuelta de ese modo porque posiblemente sea él la razón por la que hago cine. Así que fue un encuentro muy especial para mí en Oviedo, claro".

Esta semana llega un cineasta distinto a la salas: James Cameron y su secuela de "Avatar": "La veré mañana. Es un visionario, sabe muy bien lo que hace y hace las cosas de manera que merece la pena abandonar el sofá".

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