Crisis sanitaria en Madrid

El fantasma del Zendal asoma de nuevo: otra huelga, quejas de sindicatos y un contrato en duda

Más Madrid solicita la nulidad del último contrato de mantenimiento del hospital por haberse concedido "a dedo" | Los trabajadores de la empresa que ofrece el servicio de llamadas del SUMMA 112 amenaza con ir a la huelga a partir del 30 de noviembre y exige ser contratada por la Comunidad y que no se les traslade al Zendal

Isabel Díaz Ayuso visita el Hospital Enfermera Isabel Zendal en el primer aniversario de este centro hospitalario.

Isabel Díaz Ayuso visita el Hospital Enfermera Isabel Zendal en el primer aniversario de este centro hospitalario. / EFE

Elena Marín - Nieves Salinas

A la crisis laboral que vive la sanidad pública madrileña, con los profesionales de la atención primaria en huelga desde hace dos meses y los de las urgencias extrahospitalarias en pie de guerra, se ha sumado un viejo conocido del ámbito sanitario: el Hospital Enfermera Isabel Zendal. La polémica en torno a este centro público ha estado hibernando unos meses, pero su reactivación por parte de la Consejería de Sanidad el pasado viernes para derivar allí a pacientes con problemas respiratorios de las urgencias de otros hospitales lo ha sacado de su letargo.

La polémica, como es habitual desde que se construyó este hospital, proviene de dos flancos, el de los trabajadores y el político. En el primero, las quejas iniciales llegaron desde el sindicato de Enfermería Satse, que denunciaba que el Zendal sigue sin tener personal propio y eso supone trasladar a trabajadores de otros centros para dar servicio en este. Quitar de un lado para poner en otro, pero esa, apuntaban, no puede ser la solución con los problemas que hay ahora mismo en los centros de Atención Primaria y la atención hospitalaria en niveles de ocupación suficientemente preocupantes como para que la Comunidad haya querido descongestionarla reactivando el Hospital Zendal.

De momento, tras haber estado prácticamente inactivo durante todo el año pasado, en los últimos cuatro días se han trasladado un total de 15 pacientes desde otros hospitales y están siendo atendidos en el Pabellón 1, según explica la Consejería de Sanidad, que defiende que actualmente el centro cuenta "con 187 profesionales de distintas categorías, entre ellos 11 facultativos, 62 enfermeras y 64 auxiliares de enfermería".

Servicio privatizado

Tras la primera denuncia, la última amenaza laboral ha llegado por parte de los profesionales de la centralita del SUMMA 112, que han anunciado una huelga a partir del 30 de enero para reclamar mejoras salariales y para exigir que no se les traslade al Hospital Zendal. De fondo, lo que hay es una denuncia al modelo sanitario de contratación de la Comunidad de Madrid, ya que estos trabajadores pertenecen a una empresa externa, el Grupo Ilunion, y exigen la integración en la plantilla de Emergencias, es decir, que se deje de privatizar este servicio.

El traslado de la plantilla del centro de coordinación de llamadas afecta a 120 personas, según el secretario del comité de empresa, Vladimir Valentín, que ha criticado que ese traslado se produce "con el único propósito de justificar su existencia, para capricho de la señora Ayuso", según recoge Europa Press. Se quejan, además, de que la Comunidad de Madrid es la que peor paga a los profesionales de este servicio que, en su opinión, no debería regirse por el mismo convenio que otras teleoperadoras.

Pero las reivindicaciones de la plantilla del SUMMA 113 parecen, de momento, pasar de largo en la Consejería. El responsable del departamento, Enrique Ruiz Escudero, entiende las cosas de forma muy diferente. En su opinión, el traslado de estos profesionales al Zendal es un “salto de calidad en cuanto a los puestos de trabajo y sobre todo en cuanto a la actividad que pueda desarrollar el Summa” y se ha limitado a decir, a preguntas sobre las quejas del personal a ser trasladados, que las "resistencias” provienen de una empresa externa y que "no se ha valorado que dejen de pertenecer" a la misma. El objetivo, según él, es "dar un mejor servicio con una instalación con mucha mejor dotación, con más capacidad que incluso tiene una base del Summa que es un salto de calidad importante”.

Contrato de medio millón

Junto a las reivindicaciones profesionales, están las denuncias de la oposición. Más Madrid ha solicitado la nulidad del último contrato de mantenimiento para el Hospital Central, adjudicado sin concurrencia por 571.000 euros a Ferrovial el pasado 24 de diciembre. Mónica García ha asegurado que esta ha sido una contratación "a dedo" y ha criticado el dinero que se invierte en este centro frente a lo que necesitan otros hospitales. Lo que ha llamado "chapuza" de Ayuso y la acusación de que el Zendal se ha convertido en la "plataforma de contratación de sospechosos habituales", por tanto, ha terminado con el registro de una denuncia ante el Tribunal Administrativo de Contratación Pública de la Comunidad de Madrid.

Más Madrid critica que dos años después de la pandemia la Comunidad siga con contrataciones por el procedimiento de emergencia, y alega en su escrito que el Gobierno regional ha debido tener tiempo suficiente como para que el contrato de mantenimiento se licite por el procedimiento ordinario y pueda haber libre concurrencia y, por tanto, "se están saltando el procedimiento de contratación".

Algo que el consejero de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Enrique López, solo responde a la "obsesión de la líder de Más Madrid" por el Zendal. El consejero ha defendido que "se dan las causas que lo justifican" y ha asegurado que si actualmente se sigue acudiendo a contratos de emergencia es por que la Organización Mundial de la Salud (OMS) pide seguir en "alarma y en alerta", según recoge Europa Press.

"La mayoría de las contrataciones se hacen de forma normalizada, pero lo que no puede desconocer la líder de Más Madrid es que los contratos de emergencia son normalizados y previstos en la ley y hay que utilizarlos cuando se dan las causas que los justifican".

Tanto García como el dirigente socialista Juan Lobato han calificado el Hospital Zendal como "plató de televisión de Ayuso" y han vuelto a insistir en la escasa utilidad de este centro. Pero dado que ya está construido y costó más de 170 millones de euros ponerlo en marcha, Lobato apuesta por hacer convertirlo en un centro de investigación y prevención de enfermedades que sirva para aliviar las listas de espera.

La sanidad volverá a las sesiones de control a partir de febrero y es de esperar que las preguntas y peticiones de comparecencia por la situación de este servicio público en la Comunidad no cese hasta que finalice la legislatura apenas dos meses después. Respecto a si el Zendal volverá a ser también foco de las denuncias en sede parlamentaria, en Más Madrid explican que ya hay preguntas registradas y tendrán que ver si las activan.