Pablo Arias Cabal: "El yacimiento de La Garma es un sitio único en el mundo"

El prehistoriador halló cadáveres altomedievales con los cráneos destrozados en la cueva cántabra

Pablo Arias Cabal, durante su conferencia sobre el yacimiento de La Gama, en el Museo Arqueológico. | Luisma Murias

Pablo Arias Cabal, durante su conferencia sobre el yacimiento de La Gama, en el Museo Arqueológico. | Luisma Murias / Elena Fernández-Pello

Elena Fernández-Pello

Elena Fernández-Pello

El ovetense Pablo Arias Cabal, catedrático de Prehistoria de la Universidad de Cantabria, dirige las excavaciones en La Garma, en Cantabria, desde 1996. Ayer, en el Museo Arqueológico de Asturias, ante un auditorio a rebosar de público –incluyendo al director general de Patrimonio, Pablo León– e inaugurando un nuevo ciclo de conferencias, expuso los hallazgos en el yacimiento, donde han localizado unos inquietantes enterramientos de época altomedieval.

En una galería subterránea han hallado un conjunto sepulcral formado por cinco cadáveres, colocados en una singular disposición, con los cráneos destrozados tiempo después de su muerte. Sobre ellos barajan varias hipótesis. La más sólida hasta ahora es la que plantea en su tesis doctoral José Ángel Hierro: se trataría de víctimas mortales de una epidemia, aunque los arqueólogos ha buscado el rastro de la bacteria que causa la peste bubónica y hasta ahora no ha dado con él.

Los esqueletos están en "un sitio único en el mundo", de donde no hay intención alguna de sacarlos, y en un sistema kárstico complejo, en el que hay constancia de "ocupaciones desde hace medio millón de años hasta el siglo XIV, las más antiguas de todo el norte peninsular".

En un primer nivel se depositaron los cinco cadáveres, el más sobresaliente el de un varón joven, de no más de 20 años, a la entrada de la cueva y colocado de "forma escenográfica", rodeado de estalagmitas rotas, en las que se apoyaban sus pies y que quizás sostuvieran un sudario, y cerca de él un elemento metálico, con restos de resina, que podría ser un instrumento usado en la actividad textil. Más abajo se encontraron hace tres años otros tres sujetos, entre ellos una mujer, junto a un conjunto de armas, y por toda la cueva quedan restos de los haces de madera de avellano que alguien utilizó para iluminar la cueva.

Con todo ello, y con futuros hallazgos, el equipo que dirige Arias Cabal espera desvelar el misterio que esconde el yacimiento de La Garma.

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