Cumbre en Cali
Gustavo Petro alerta en la apertura de la COP16 sobre el peligro de extinción de la biodiversidad
"Nuestra razón de ser es cuidar la vida y no destruirla", dijo el presidente colombiano a representantes de 188 países

António Guterres, durante la inauguración de la COP16. / EFE
Abel Gilbert
"Ilusos los que piensan que el mercado libre podrá llevar a la maximización del bienestar y que llevará a los seres humanos a ser portadores de la vida. Ilusos los que creen que no mirar hacia arriba o hundir la cabeza en la tierra, pasarán los hechos sin afectarle. Ilusos, los que niegan la extinción de la biodiversidad". El presidente Gustavo Petro inauguró en la Amazonía colombiana la Cumbre de Biodiversidad (COP16) con un llamado a las delegaciones de 190 países a comprometerse con "la más grande batalla está por comenzar... la gran batalla de la vida". A lo largo de 12 días, los participantes de la reunión que comienza formalmente este lunes en Cali deben discutir la marcha de los compromisos y objetivos asumidos para enfrentar dos asuntos estrechamente ligados: el cambio climático y la pérdida de biodiversidad. Para Petro, el tiempo apremia. "Nuestra razón de ser es cuidar la vida y no destruirla".
Para el mandatario colombiano la emergencia obliga a enfrentar problemas entrelazados: los combustibles contaminantes y el estado actual de la economía global. "Los que más emiten CO2 a la atmósfera son las economías fósiles, petroleras y carboneras, son las economías poderosas de Estados Unidos, China y Europa", dijo. "Necesitamos cambiar las finanzas mundiales, es el tema de este foro. Hoy están ligadas a la codicia, es decir, a la muerte. ¿Quién dijo que la vida planetaria se pone a salvo a través de proyectos bancarios, ligados a la tasa de interés, a proyectos que dan ganancias y llenan las hambres de la codicia? ". En ese sentido, consideró "fundamental" cambiar deuda por acción climática. Para Petro es "un verdadero contrasentido moral y mortal" la situación. Los "más ricos" y "depredadores" deberían a su criterio pagar "impuestos para eliminar el carbono de la producción y del consumo".
El lema de la COP16, “Paz con la naturaleza”, debe guiar las deliberaciones que siguen a los trabajos que concluyeron en diciembre de 2022 con la aprobación del Marco Mundial Kunming-Montreal sobre Diversidad Biológica. Se trata de cuatro objetivos y 23 metas globales acordadas por 188 países firmantes de la convención para "frenar y revertir" la pérdida de biodiversidad planetaria. Entre sus objetivos se encuentran poner freno al proceso de extinción de especies inducida por los humanos para 2050. Una de las metas más ambiciosas es la conservación en 2039 del 30% de la superficie terrestre, acercar a cero la pérdida de superficies de suma importancia para la biodiversidad e incrementar el financiamiento a países en desarrollo para abordar las situaciones problemáticas. Los conocedores sostienen que si bien los acuerdos de Montreal supusieron un triunfo del multilateralismo se necesita en adelante voluntad política y mucho dinero para garantizar su cumplimiento.
Palabras de Guterres
El Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, quien viajará la próxima semana a Cali, participó de la ceremonia de apertura a través de un video cargado de advertencias. "El Marco Mundial para la Biodiversidad Kunming - Montreal promete restablecer las relaciones con la Tierra y sus ecosistemas. Pero no vamos por buen camino. Nuestra tarea en esta COP es pasar de las palabras a los hechos. Esto significa que los países presenten Planes de Acción claros que alineen las acciones nacionales con todos los objetivos del Marco. Significa acordar un marco reforzado de seguimiento y transparencia. Y significa cumplir las promesas financieras y acelerar el apoyo a los países en desarrollo". Advirtió a su vez que la destrucción de la naturaleza empeora los conflictos globales y alimenta la pobreza, la desigualdad y la crisis climática, y perjudica el desarrollo sostenible, los empleos verdes, el patrimonio cultural y el PIB global.
La consigna "hacer la paz con la naturaleza" le pertenece a Guterres. La dijo cuatro años atrás cuando definía la "tarea definitoria" del presente siglo ante la "guerra" que se lleva a cabo contra el ambiente. En medio de la pandemia por Covid-19 adquirió fuerza institucional cuando apareció como título de un reporte presentado por el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma).
La ministra de Ambiente del país anfitrión, Susana Muhamad, puso el acento en la necesidad de sintonizar con ese anhelo. "Necesitamos buscar un cambio de visión, de paradigma. Para nosotros la paz con naturaleza implica un cambio conceptual de los valores. La naturaleza no es un recurso, es la fibra de la vida que hace que nosotros mismos también seamos posibles". Petro le impuso un tono más dramático a su discurso y habló de los "ricos megapoderosos que sueñan en ser dueños de redes y de inteligencias sin vida y escaparse a Marte en sus naves de ensueño mientras dejan sus culpas en la tierra destruida".
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