Este Sporting sin fichajes es un equipo ya hecho. Los mecanismos de la pasada temporada siguen vigentes en los hombres de Abelardo a los que solo les queda afinarlos a la espera de nuevos mimbres que les den un salto de calidad.

Como decimos el Sporting fue el equipo serio de siempre. Presión alta, ataques rápidos, búsqueda de contragolpes y llegadas por banda. Comenzó el encuentro poniendo de relieve estas virtudes pero el Almería es el equipo de más enjundia al que se ha enfrentado en esta pretemporada y supo darle la vuelta al partido.

Poco a poco se fue rehaciendo a base de posesiones largas aunque los gijoneses no sufrían en demasía y buscaban los espacios al contragolpe.

Pudieron marcar los de Abelardo por medio de Guerrero o Castro pero no fue hasta el comienzo de la segunda mitad cuando Guerrero aprovechó el centro de Álex Menéndez para batir a Casto.

Carrusel de cambios habitual en la segunda mitad, menos ritmo de juego y un mayor dominio de los andaluces que se hicieron con el dominio del partido aunque sin gran profundidad.

Chuli empató el encuentro tras aprovechar una indecisión defensiva y de aquí al final los minutos fueron pasando sin oportunidades para ninguno de los dos equipos.

Empate final en un partido igualado, aunque el Sporting fue mucho más incisivo con el balón, y que volvió a poner de manifiesto la dificultad para derrotar al equipo rojiblanco pero también la necesidad de refuerzos o alternativas para superar a equipos de mayor nivel.