"Me gustaría meter muchos goles, pero no voy a decir una cifra". Arnaldo Antonio Sanabria Ayala (San Lorenzo, Paraguay, 4 de marzo de 1996) evita la presión de situar un listón. El delantero se muestra ambicioso y tiene claro que su rendimiento se va a medir por la estadística de goles. Una cifra alta multiplicará las opciones de permanencia rojiblanca: "Vine aquí para ayudar al equipo y yo ayudo haciendo goles". Lo cierto es que Tonny Sanabria, uno de esos talentos en bruto que brotan en La Masía culé, llega a Gijón para dar un nuevo impulso a su carrera. Es el escenario ideal, seguramente el equipo con la media de edad más baja de Primera División y con un entrenador, exigente, al que no le tiembla el pulso al llenar en césped de guajes.

Sanabria tuvo ayer su primera toma de contacto con sus compañeros, con el entrenador y con Mareo. El miércoles sólo había conocido las oficinas. "Las sensaciones son muy buenas. No tuve mucho tiempo aún para ver la ciudad, pero tiene un centro deportivo muy bueno en el que los compañeros me acogieron muy bien y eso es lo que al final cuenta", agradece. Nico Rodríguez, director deportivo rojiblanco, lo presentó como un delantero "joven, con proyección y margen de mejor. Encaja en el perfil que estamos buscando".

El ariete no esconde que busca en Gijón los minutos de los que no disfrutó en Roma, ni durante su cesión al Sassuolo. "No tuve los minutos que quería anterior donde estuve y aquí se me está dando la oportunidad de crecer como futbolista", admite.

Tonny Sanabria llega a Gijón en buen estado de forma ya que ha venido entrenándose con el Roma. "Estuve entrenando siempre, no me paré. Lo que me falta ahora mismo es ritmo de partido, pero eso aquí lo voy a coger seguro", sostiene. El futbolista ha recabado informes sobre el Sporting antes de decidirse por la propuesta rojiblanca. Y tiene muy presente que el primer rival será el Real Madrid, un reto que afronta con naturalidad: "Al final, tienen que llegar el partido ante el Madrid y es mejor disputarlo pronto y no al final, cuando te lo estés jugando todo". Sanabria prefiere quitarse cuanto antes a los rivales más duros. El ariete vivió de cerca hace poco menos de un mes lo que supone enfrentarse al conjunto blanco, aunque sea en un partido veraniego ante la Roma, que terminó con empate sin goles y que se llevaron los italianos por penaltis. "Siempre es un placer jugar contra ellos". Sanabria pidió informes a excompañeros y, aunque no lo cita, todo apunta a que se trata del portero gijonés del Barcelona José Aurelio Suárez: "Vine aquí por todo lo que me información de que al entrenador le gusta la gente joven, de que hace jugar a la mayoría... Estuve hablando con un compañero que tuve en el Barcelona y fue quien me comentó que es una buena ciudad, que la afición está a muerte contigo y que aquí puedo jugar porque apuestan por los jóvenes".

Tonny Sanabria se convierte en la segunda incorporación del Sporting este verano, tras la llegada de Omar Mascarell. El delantero, internacional absoluto con Paraguay, evitó definirse como futbolista, ya que prefiere hablar sobre el campo y que sea el público quien lo valore. Sanabria aún no ha tenido la ocasión de hablar con Abelardo para ver qué espera de él, aunque se ofrece para jugar el encuentro de mañana ante el Villarreal. "No tuve la oportunidad todavía de hablar con el entrenador, pero creo que puedo jugar este sábado porque estoy entrenando, pero eso depende de él", apunta. Sobre el primer encuentro con sus compañeros, aclara que "se portaron muy bien conmigo".

Sanabria agradeció el apoyo de la afición rojiblanca: "Ya antes de llegar aquí, estando en Roma, me llegaron muchos mensajes y se nota ese apoyo, es algo muy lindo que no me esperaba". Su último gol en España se lo hizo al Sporting, ahora espera "hacer al revés y marcarle al Barcelona".