El buen inicio liguero ha aplazado los cambios, las alternativas trabajadas a lo largo del verano para atender las necesidades durante la Liga. Abelardo dejó los deberes hechos durante los ensayos previos a la competición, un proceso en el que mostró, mayoritariamente, tres de los esquemas que tiene previsto utilizar esta campaña. El primero, con dos delanteros de inicio, es de sobra conocido y ha sido el protagonista de los trabajados empates ante el Madrid y la Real Sociedad. El segundo, caracterizado por la inclusión de un mediapunta por detrás de un único delantero, ya se estrenó durante los minutos finales de ambas jornadas. El tercero, y más novedoso, es el de actuar con tres centrocampistas en la medular. Todos componen el plan de Abelardo para la permanencia.
Por no cambiar, el Pitu no ha cambiado ni el once titular. El entrenador rojiblanco amplió en San Sebastián el esquema y los protagonistas con los que el conjunto gijonés dio la campanada en la jornada inicial, con un valioso empate ante el Real Madrid. El gesto se convirtió en una recompensa hacia los autores del gran partido protagonizado por el Sporting y también en un refuerzo al sistema táctico que casi no había utilizado desde que se encontrara en la plantilla a Scepovic y Lekic. Sanabria y Guerrero han sido los elegidos para formar la pareja atacante y dejar en el olvido, por el momento, el dibujo preferido por el Pitu en la campaña del ascenso, en el que el de Borox actuó, en la mayoría de las ocasiones, con un mediapunta a su espalda.
La materia táctica, tan compleja, en ocasiones, como discutible, es una de las asignaturas que mejor maneja Abelardo. El entrenador del Sporting recibió unánimes elogios por su puesta en escena en Anoeta, que amplió los méritos exhibidos ya una semana antes en El Molinón. En los minutos finales de ambos encuentros pudo verse uno de los planes alternativos, la presencia del enganche por detrás de la principal referencia ofensiva. En estas ocasiones, la entrada de Juan Muñiz desembocó en esta variante.
El que todavía no se ha probado a fondo en competición oficial es el destinado a fortalecer la zona de creación y, posiblemente, el reservado para los encuentros en los que el Sporting necesite llevar un mayor peso en el juego. Abelardo ya trabajó el "trivote", la presencia de tres centrocampistas en el eje central del campo, en varios amistosos, como la visita al Racing de Ferrol, donde el experimento no salió del todo bien. La idea es que Sergio pueda actuar unos metros por detrás de sus dos compañeros. Plazas, estas últimas, reservadas para combinar, a priori, a Nacho Cases con Mascarell o Rachid. No parece, sin embargo, que para recibir al Valencia el sábado Abelardo vaya a cambiar mucho su pizarra.
