La gran oleada rojiblanca desembarcará esta mañana, pero las primeras olas de sportinguismo bañaron desde ayer la playa de Riazor. El número de desplazados ha ido engordando a medida que se acercaba la hora del partido. La prensa gallega informa de que, además de las dos mil entradas despachadas en Gijón, son muchos los aficionados rojiblancos que han adquirido sus localidades por internet o directamente dirigiéndose al club gallego. Finalmente, la cifra de aficionados rojiblancos podría superar los tres mil aficionados.

La Mareona no falla en su desplazamiento fetiche, aunque es una oleada mucho menor que en ediciones anteriores en las que llegó a alcanzarse la cifra de siete mil sportinguistas. Riazor es un campo talismás para el sportinguismo, que lleva diecisiete años sin ganarle un partido de Liga a los rojiblancos.

El partido ha sido declarado de alto riesgo por el conocido enfrentamiento de Ultra Boys con los Riazor Blues y el Dépor ha prohibido el acceso con símbolos rojiblancos fuera de la zona acotada para los visitantes.