El Sporting está en números de permanencia. Los rojiblancos, si mantienen el ritmo de puntuación de las siete jornadas disputadas, se irían a los 43 puntos al final de la competición. Uno más de los 42 en los que Abelardo ha fijado el listón de la permanencia. El objetivo principal pasa por ser 17.º al final de temporada, para lo que suele estimarse que se necesitan los 42 puntos que demanda el Pitu. Sin embargo, no siempre han sido suficientes. Un análisis de las dieciséis temporadas en las que lleva aplicándose el modelo actual para decidir los descensos, aporta mucha información y algún dato curioso.
Lo más destacado es la igualdad. La permanencia es cuestión de detalles. En doce de estas dieciséis temporadas, la permanencia se ha decidido por una diferencia de un punto o por el golaverage. La mayor diferencia entre el último equipo salvado y el primero de los descendidos la consiguió el Espanyol en la temporada 2002/03, en la que aventajó en siete puntos al Recreativo, el mejor de los descendidos.
La clave es la posición 17.ª. El promedio de puntos sumados por los equipos que ocuparon esa plaza en las últimas dieciséis temporadas es de 40,81 puntos. Es decir, la media aritmética sitúa la permanencia por debajo de los 42 puntos en que suelen fijarla los técnicos. En realidad, aún sería más baja, porque el promedio de puntuación de los equipos que ocuparon la primera plaza de descenso (el puesto 18.º) es de 39,31 puntos.
La aritmética no entiende de casos puntuales. La singularidad de casos puntuales. Por ejemplo, el Granada logró la temporada pasada la permanencia más barata desde que se aplica el modelo actual de competición al lograr salvarse con sólo 35 puntos. Menos de un punto por partido. Por contra, el Deportivo de La Coruña descendió en la campaña 2010-11 con 43 puntos, la cifra más alta con la que ha descendido un equipo desde que bajan tres de forma directa.
No es fácil calcular si esta temporada harán falta muchos puntos o no. Pero hay algunos datos que permiten sacar conclusiones. Por ejemplo, la cantidad de puntos que se han ido dejando los equipos grandes. Esta última jornada ninguno de los cinco primeros clasificados logró la victoria. El Real Madrid, por ejemplo, se ha dejado puntos ante Sporting y Málaga y el Barcelona lo hizo ante Celta y Sevilla. La tiranía de los dos grandes en las conocidas como ligas de cien puntos, reducía notablemente la anotación de los equipos modestos. Lo que mismo que pasa por arriba, pero al criterio, ocurre cuando un equipo se descuelga como colista y suma muy pocos puntos.
Las primeras estimaciones que manejan los técnicos del club apuntan a que la permanencia de este año no va a ser tan barata como la de la temporada anterior.
Otro factor muy importante a manejar es el de los enfrentamientos directos. Al menos, en dos ocasiones en estos dieciséis años, la permanencia se ha decidido por el goalaverage particular. El Sporting lo sabe mejor que nadie, ya que la temporada pasada protagonizo un hermoso duelo con el Girona. Además de sumar el máximo número de puntos posibles, los dos equipos se esmeraban en lograr los resultados más abultados. Girona y Sporting empataron a 82 puntos y tenían igualado el goalaverage particular. El Sporting ascendió por su mejor coeficiente goleador. En la última jornada de Liga, el Sporting necesitaba que el Lugo derrotase al Girona en Montilivi y que los rojiblancos fueran capaces de ganar por dos o más goles de diferencia al Betis. En una mágica tarde sevillana, se dieron todas estas circunstancias.
