El consejo de administración del Sporting ha decidido mover ficha ante la Liga y ha solicitado formalmente un cambio de horario para el encuentro ante el Betis en el Benito Villamarín. Pero el máximo organismo del fútbol ha rechazado esta posibilidad: "En relación a su solicitud referida a retrasar su encuentro correspondiente a la Jornada 25, comentarles que una vez revisada nuevamente toda la jornada es imposible efectuar modificaciones en la misma, al estar relacionada directamente con los partidos de Liga Europa y Liga de Campeones".

La visita al Betis queda confirmada para el sábado 20 de febrero a las 20.30 horas, tan sólo tres días después del encuentro aplazado ante el Barcelona que se jugará en El Molinón el miércoles 17 de febrero a las 18.30 horas. El Sporting pidió que la visita al Villamarín se pospusiera al domingo, para que el equipo tenga un día más de descanso entre los dos partidos y pueda prepararlo y hacer el viaje con comodidad. Su solicitud fue rechazada.

La Liga causa un doble perjuicio al Sporting. El primero económico, porque para los equipos modestos la taquilla que deja la visita del Barcelona es un ingreso importante. Al jugarse un día laborable a las 18.30, la afluencia de público se resiente de forma evidente. El Sporting ha decidido que este encuentro no sea finalmente día de ayuda al club como estaba previsto. El consejo baraja la posibilidad de que lo sea la visita del Atlético. Además del perjuicio a los abonados que pagan el carnet y que no podrán asistir a uno de los partidos más atractivos de la temporada. La Liga se escuda en que ese miércoles hay Liga de Campeones y no puede coincidir con ningún partido oficial.

Por otro lado, está el perjuicio deportivo. El partido ante el Barcelona se aplazó porque el conjunto azulgrana disputó el Mundialito y ahora se incrusta tres días antes de un partido decisivo para el Sporting en el que visita a un rival directo. La Liga ni siquiera tuvo el tacto de poner este encuentro en domingo.

Javier Fernández, máximo accionista del club, estuvo ayer en Madrid, donde asistió a la última junta directiva de la Federación Española en este periodo. El dirigente rojiblanco aprovechó su estancia en Madrid para solicitar a la liga el cambio de horario del partido ante el Betis. Abelardo tendrá que dosificar y exprimir a su corta plantilla.