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El más rápido de los pistoleros

Sanabria, que firma diez goles en sus quince primeros partidos en Primera, sólo es mejorado por los históricos Pío (15) y Méndez (12) - El paraguayo de 19 años, cedido por la Roma, que paga su ficha, entra en la historia de los grandes goleadores rojiblancos

El más rápido de los pistoleros

Para un equipo como el Sporting, un especialista del gol del calibre de Tonny Sanabria es un sólido argumento al que aferrarse en la pelea por la permanencia. No es fácil hacer diez goles en quince partidos en Primera. Mucho menos, lograrlo con 19 años y en el debut en la máxima categoría. Hay que remontarse a las primeras temporadas del Sporting en Primera División, allá por la década de los cuarenta, para encontrar algún rojiblanco que mejore las cifras del delantero paraguayo. Nadie puede con Pío. El gran goleador del primer Sporting anotó 15 goles en sus primeros quince partidos en la máxima categoría. También en aquella época, Méndez firmó doce goles en los primeros pasos del Sporting en la máxima categoría.

Hasta Sanabria, nadie había vuelto a a acercarse a los números de estos míticos goleadores. No es fácil competir en Primera, nunca lo ha sido. Incluso a delanteros más hechos que Sanabria y que ya habían demostrado su buen olfato en el fútbol de plata les costó cogerle el punto a la categoría. El mismo Quini, el gran goleador de la historia del Sporting, firmó sólo dos goles en sus primeros quince partidos en la máxima categoría. Está todo dicho. El mismo Luis Enrique firmó cuatro goles. Una cifra muy razonable para un chaval que debuta. Eloy Olaya, otro reputado goleador internacional, no firmó su primer gol hasta su vigésimo partido en Primera.

Por detrás de Sanabria aparece ya un delantero del prestigio de Julio Salinas. Un caso totalmente diferente al del paraguayo. Salidas, delantero consagrado, llegó al Sporting con más recorrido a su espalda que por delante. Aún así, en su primera temporada en El Molinón anotó ocho goles en sus primeros quince partidos como rojiblanco. Fernando Gomes y Mate Bilic, el último gran goleador del Sporting, se quedaron en siete tantos en su estreno en Primera.

Hay también en la historia del club grandes goleadores que no tuvieron la posibilidad de desafiar el récord de Pío, porque nunca jugaron con el Sporting en Primera. Scepovic es un caso reciente. El delantero serbio anotó once muescas en su revólver en sus quince primeros partidos como rojiblanco, pero lo hizo en la categoría de plata. Ni siquiera un joven David Villa lo tuvo fácil cuando dio el salto al primer equipo. El guaje acabó haciendo 18 goles aquella temporada, pero en sus quince primeros partidos en Segunda sólo fue capaz de anotar dos.

El rendimiento de Sanabria tiene el valor añadido de que ha llegado cedido por la Roma y es el propio conjunto italiano el que se hace cargo de la ficha del futbolista. Un negocio redondo pergeñado por los buenos contactos del Pitu Abelardo, una operación en la que se espera que ganen todas las partes. El beneficio para el Sporting es evidente. El futbolista recibe la oportunidad de demostrar su talento en Primera División, algo que hasta ahora no había conseguido ni en España ni en Italia. Y el conjunto romano ve cómo se revaloriza un futbolista que aún se encuentra en edad de formación, por el que le pagó una importante cantidad de dinero al Barcelona y al que ya podrá comenzar a rentabilizar, económica o deportivamente la próxima temporada.

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