El Sporting perdió la primera final como las pierden los equipos modestos. Le faltó fútbol y quizá algo de osadía. De nuevo el rival se lleva los puntos con muy poco: una acción individual del joven Juanpi, propiciada por un error rojiblanco en la salida de balón (ay, esos vicios de juventud) y que el Sporting pudo desbaratar hasta en tres ocasiones. No lo hizo y en ese recorte de Juanpi, se le fue media vida. Para que el drama fuera completo, Carlos Castro estrelló un balón en el palo y De Burgos Bengoetxea volvió a ignorar un penalti de libro por una mano flagrante de Fornals para tapar un centro de Halilovic. La decisión evitó el posible empate, que tampoco habría sacado de pobres a los rojiblancos.

Cuesta a veces entender a los entrenadores. El día que más falta hacía el fútbol, Abelardo prescindió del futbolista de más talento. Tampoco fue fácil digerir la retirada de Sanabria, salvo que el parte médico diga lo contrario.

[if IE 9]><link rel="stylesheet" type="text/css" href="http://widget.cloud.opta.net/2.0/css/ie9.widgets.opta.css" media="screen" /><![endif]

[if IE 8]><link rel="stylesheet" type="text/css" href="http://widget.cloud.opta.net/2.0/css/ie8.widgets.opta.css" media="screen" /><![endif]

[if IE 7]><link rel="stylesheet" type="text/css" href="http://widget.cloud.opta.net/2.0/css/ie7.widgets.opta.css" media="screen" /><![endif]

Queda el Sporting en una situación crítica. Con cuatro derrotas consecutivas y ocho partidos seguidos sin ganar. Las señales son alarmantes. El equipo ofreció mejor cara ayer, pero fue incapaz de superar a un Málaga que se daba por conforme con el empate y que se encontró con la victoria. Es cierto que el conjunto andaluz dominó en muchas fases del partido y que tiene algunos talentos jóvenes que valen un dinero. Brillo Juanpi, pero subrayen a Fornals. Con todo fue el Sporting quien tuvo más y mejores ocasiones. Ochoa demostró solidez y oficio y las despachó con mucha solvencia.

Al Sporting ya sólo le queda la heroica. Sumar ante los grandes lo que se le escapa ante los rivales directos. Sería bueno también saber qué futbolistas están implicados en este proyecto.

Abelardo anunció que había que correr, que eso de la técnica estaba bien, pero que aquí no había ningún Messi. Señaló directamente a Halilovic, al que le reprocha no tapar líneas de pase. Quizá sea cierto, pero también lo es que el croata no se esconde, que en el segundo tiempo ante el Athletic fue uno de los pocos que pidió el balón e intentó hacer cosas. Quitar a Halilovic es fácil en el Sporting, pero puede ser un lujo excesivo, precisamente porque aquí no hay ningún Messi y Halilovic es el futbolista que más líneas de pase ve. Taparlas puede cualquiera; crearlas, sólo unos pocos. Abelardo señala a Halilovic, cuando hay compañeros que llevan semanas tapados para no coger frío.

En apenas treinta segundos el Sporting hizo más que en todo el partido ante el Athletic. Los rojiblancos tienen bien trabajado el saque de centro y ayer generaron una buena ocasión, la mejor suya en todo el primer tiempo. Un centro de Jony fue controlado acrobáticamente por Sanabria y el paraguayo resolvió con un zurdazo raso, a la cepa. Nada que hiciera despeinarse a un portero de la entidad de Ochoa, internacional con México y suplente continuo en La Rosaleda. El Málaga fue creciendo, aunque sin llegar a agobiar. En una jugada de tantas, Cuéllar puso el balón en juego hacia Meré, que se entretuvo en exceso, Charles le aplico más fe a la jugada y quizá desplazó al guaje, y se llevó la pelota. Fue acción sucia, llena de errores groseros y de malas decisiones, hasta que recibió Juanpi y se hizo la luz. Con un solo quiebro, destrozó a tres defensas y logró el metro que necesitaba para envenenar el balón con una rosca al segundo palo.

El Málaga ya no hizo más. Abelardo dejó a Ndi y soltó a Carlos Castro. El Sporting dio un paso al frente, pero con pocas llegadas. Un arranque de Lora permitió un gran cabezazo de Sanabria. Otra arrancada de Isma López fue bien rematada por Pablo Pérez; Ochoa dejó el balón vivo y Carlos Castro no fue capaz de embocar. A la desesperada, el Sporting cargó de nuevo. Halilovic metió un balón al área y provocó la zamorana de Fornals. De Burgos Bengoetxea se dio mus como aquella tarde en La Condomina. Como siempre.

Con nueve jornadas por jugar, urge alcanzar un acuerdo que desconvoque la huelga declarada por el Sporting. Hay que ponerse a trabajar para limpiar el horizonte.

[if IE 9]><link rel="stylesheet" type="text/css" href="http://widget.cloud.opta.net/2.0/css/ie9.widgets.opta.css" media="screen" /><![endif]

[if IE 8]><link rel="stylesheet" type="text/css" href="http://widget.cloud.opta.net/2.0/css/ie8.widgets.opta.css" media="screen" /><![endif]

[if IE 7]><link rel="stylesheet" type="text/css" href="http://widget.cloud.opta.net/2.0/css/ie7.widgets.opta.css" media="screen" /><![endif]