"Podéis llamarme Babín, como se escribe, porque llevo mucho tiempo en España y ya casi me siento español". Por delante del corpachón del poderoso defensa central, aparece un sonrisa inmensa. Sorpresa Babin en las distancias cortas. Ayer fue presentado oficialmente, aunque ya se había entrenado con sus compañeros poco antes e incluso había participado en el partido de Nancy. Luego salió afuera y se quedó allí, con su mujer y su representante, firmando autógrafos, haciéndose fotos y charlando afablemente con todo el que se acercó. Así se supo la curiosa historia de su mujer, también futbolista que juega de delantero centro y aspira a encontrar un equipo en Asturias.

"Las ilusiones son muy grandes y el objetivo sabemos que es la permanencia y esperemos no sufrir demasiado". Babin resume de esta forma sus expectativas al llegar a Gijón con la carta de libertad bajo el brazo. Se compromete por tres temporadas y no le da ninguna importancia al hecho de haber sido cortado en el Granada después de haber jugado 60 partidos en Primera División en los últimos dos años. "Hablé con el entrenador y me dijo que lo mejor era buscar una salida y fue muy honesto conmigo, cosa que le agradezco porque me ayudó bastante a salir", señala antes de aclarar que, en el Granada, "hay otro presidente, otra directiva y querían otros centrales, no es nada grave, el fútbol da muchas vueltas y ahora soy un sportinguista más y estoy muy a gusto".

Cuando se le pregunta por qué escogió el Sporting, se ponen varios nombres la mesa: "Lo primero que me atrajo fue la presencia de Nico, al que conozco del Alcorcón, donde estuve con él cuatro años. También tuve una conversación con Abelardo en el mes de julio y me convenció bastante. También he tenido compañeros como Barral y Gregory, que me dijeron que no lo dudase ni un segundo porque el Sporting es un club muy grande e histórico".

Babin se ha llevado una buena primera impresión del Sporting y de sus compañeros y asume con naturalidad la fuerte competencia que se va a encontrar. "Las competencias están en todos los equipos, yo he venido para sumar, soy un jugador más de la plantilla que voy a competir por el puesto", sostiene. Sabe también que la defensa es la línea fuerte del Sporting y asegura que "me veo capacitado para responder a esa exigencia, tengo ganas de debutar en la Liga y hacerlo de la mejor manera".

La presencia de Abelardo es otro de los atractivos que encuentra el zaguero. "Todos conocemos a Abelardo, que fue un gran central del Sporting, del Barcelona y de la selección española, y es un honor estar a su servicio", sentencia. Por último, compara su juego con el de su amigo Gregory, porque "los dos somos muy fuertes".