Javi Fuego acaba de empezar su octava temporada en Primera División, lo que le convierte en el asturiano con más experiencia en la categoría. A sus 32 años (Pola de Siero, 4-1-84), Fuego ha pasado del Valencia al Espanyol, el sexto equipo de su carrera. El primero, el Sporting, sigue ahí como una cuenta pendiente para un futbolista que dejó huella en todos los sitios por donde pasó.

-¿Por qué dejó el Valencia?

-Sabía que Pako Ayestarán contaba conmigo. En pretemporada me confirmó que era un hombre importante para el equipo, pero llegó una oferta del Espanyol irrechazable, por tres temporadas. Además, me llamó Quique. En Valencia se portaron muy bien conmigo. Se retrasó un poco, pero en cuanto encontraron a un sustituto, Mario Suárez, me dejaron salir. Me fui con buen sabor de boca porque era el momento de afrontar otro reto. Estaré orgulloso siempre de haber disfrutado de un club grande, con el que jugué 116 partidos.

-Pero también una entidad con muchos líos internos.

-Según pasan los años procuro quedarme con las cosas buenas. Es un club muy intenso, tanto para lo bueno como para lo malo. Seguro que con el tiempo volveré a la ciudad y a Mestalla.

-Este Espanyol apunta alto.

-El proyecto es ambicioso y eso anima. No hay más que ver los nombres de los fichajes. Se está formando una plantilla fuerte, con dos hombres que compitan por cada posición. Yo me tomo como un reto personal aportar algo al equipo. Cuando eres veterano das más importancia al colectivo.

-¿Hubo alguna opción de volver al Sporting?

-Me llegaban noticias de amigos de la Pola. Sé que soy del gusto de Abelardo y agradezco las palabras que me dedicó. Pero no hubo nada más allá. El Sporting arrastra limitaciones económicas y sabía que el Valencia iba a exigir un dinero de traspaso. No se sabe lo que puede pasar en el futuro, pero al firmar tres años aquí acabaré con 35. A ver cómo estoy entonces.

-¿Y cómo ve al Sporting para esta temporada?

-Estoy de acuerdo con Abelardo en que tiene más fondo de armario. Veo a un equipo capaz de practicar el fútbol directo del año pasado, con fases para tener más el balón. Ha hecho buenos fichajes, jóvenes con proyección y jugadores arriba verticales y asociativos. Tiene, además, una buena base con Cuéllar, Meré, que va a crecer, y Sergio, que es fundamental. Tiene mimbres para hacer una buena temporada, mantenerse y sanearse definitivamente en lo económico.