Tras dos años en un pedestal, Abelardo Fernández Antuña (Gijón, 19-4-70) está descubriendo los sinsabores de su profesión. El Sporting atraviesa un momento crítico, en el que incluso se cuestiona la labor del técnico desde un sector de la afición. Abelardo se confiesa tocado por lo que pueda afectar a su familia y, aunque está convencido de que el Sporting se va a salvar, avisa de que no será un obstáculo para el club de su vida por mucho que tenga contrato hasta 2020.

-¿Se va a salvar el Sporting?

-Seguro que sí. La situación es muy negativa en las últimas semanas, pero estoy convencido de que nos vamos a salvar.

-Se le ve más optimista que después del Villarreal?

-Soy una persona a la que se le notan mucho los estados de ánimo y siento mucho al Sporting porque soy de aquí. Siempre he sido optimista, pero no hay que esconder la racha negativa y, después del día de Villarreal, en mi pensamiento estaba que yo pudiera ser un estorbo para conseguir el objetivo. Yo no lo creo así y el club tampoco lo cree, me ha mostrado siempre su máxima confianza, cosa que agradezco.

-¿Tuvo dudas?

-En una racha tan negativa, el entrenador siempre es el máximo responsable. Lo que no quiero es ser un estorbo para nadie y menos para mi club y que se sientan obligados a que siga en el banquillo.

-¿Alguna vez le rondó por la cabeza la idea de dimitir?

-No. En primer lugar, tengo que decir que nunca me he sentido más querido, ni tan agradecido por parte de la gente como estos días. Evidentemente, es duro que las cosas no salgan todo lo bien que a mí me gustaría, pero entiendes que es fútbol y que todos los entrenadores pasan momentos malos. Hay que superarse, intentar empezar a ganar partidos y revertir la situación.

-¿Diría que es su peor momento en el primer equipo?

-Es el año más duro en cuanto a resultados, sin duda. Nunca había tenido una racha tan negativa. En cuanto a nivel de presión, fue mucho más duro el primer año, cuando el club estaba en una situación muy delicada si no subíamos. Si el Sporting baja ahora a Segunda, Dios no lo quiera, estará prácticamente saneado y económicamente podrá subsistir, cosa que no era así hace dos años.

-¿Qué habló con Javier Fernández?

-Que tenemos que intentar mejorar y que no hay ningún problema por el contrato. Él quiere un proyecto de cuatro años y yo estoy encantado, me gustaría estar siempre en el Sporting, en la categoría en que estuviésemos, estoy muy a gusto y me siento muy identificado con el club. Ya le dije a Javier que en ningún momento quiero ser un estorbo para el Sporting, para él, ni para nadie. Es cierto que hablo mucho con él, que tenemos muy buena relación y que intentamos que el club mejore. En estos dos años, creo que hemos conseguido un cambio muy importante en todos los aspectos. Ahora lo importante es mantener al equipo en Primera.

-¿Se va a mejorar también la plantilla?

-Para nosotros es muy difícil. Por parte del club ha faltado a veces dar más información a la gente de cómo estamos y de lo que es la realidad del club. Tenemos muy poco dinero para fichar. Los jugadores de Primera División cobran mucho y nosotros no podemos llegar a esas fichas. Eso la gente no lo sabe y no lo valora. Con eso no digo que el Sporting no tenga que mejorar y salir del descenso, pero el Sporting está en puestos de descenso en cuanto a presupuesto y por mucho que se hayan hecho trece fichajes, han sido a precio de saldo. Alavés o Leganés tienen jugadores que nosotros pretendimos. El club está trabajando para que esto se mejore, para saldar esta deuda. Si conseguimos mantener el equipo en Primera, en diciembre del año que viene alcanzaremos la deuda cero. Eso no quita para que entienda la impaciencia de la gente, que quiere que el Sporting tenga resultados. Tenemos que volver a que El Molinón sea un fortín. El ambiente no está siendo el más adecuado por culpa nuestra, porque no les estamos ofreciendo el juego que queremos, pero tenemos que estar todos unidos. Sé que no es fácil exigir cuando no estamos dando. Si vamos por separado, no vamos a conseguir el objetivo y ver al Sporting otra vez en Segunda sería muy malo para todos.

-¿Qué posiciones son las que te urge reforzar?

-Cualquiera que mejore lo que hay. Yo creo que nos ha faltado un extremo profundo, que llegue a línea de fondo y que meta centros y creo que necesitamos físico en el centro del campo. No es fácil encontrar eso por el dinero que tenemos, pero la secretaría técnica, con Nico a la cabeza, con Antonio, con Tomy y con Isma, está haciendo un trabajo increíble y seguro que vamos a acertar.

-¿Hay alguna opción con Jony?

-No hay nada. No ha habido ninguna conversación. Jony tiene un contrato en el Málaga, con un dinero importante, y encima ahora vendrá un nuevo entrenador al Málaga.

-¿Mantiene contacto con Jony, Luis Hernández o Bernardo?

-Con Jony más porque hay una amistad, pero no va a regresar.

-¿Contempla alguna salida para liberar más dinero?

-Bueno, estamos hablando de esa posibilidad. Primero porque creo que para el propio jugador será bueno para que se sienta mejor y participe en otros equipos y a nosotros nos vendría bien porque no quiero una plantilla demasiado amplia.

-¿Hay un caso Carlos Castro?

-No. Yo he demostrado que Carlos Castro va a jugar en cuanto lo vea conveniente, pero tiene que conseguir esa regularidad que creo que le falta en todos los aspectos. Soy un entrenador que ha demostrado que cualquier jugador que lo merezca va a jugar. Ahí está el caso reciente de Carmona, por poner un ejemplo.

-A Nacho Cases, ¿lo ve bajo de forma?

-No. Lo que pasa es que en estos partidos no he creído conveniente utilizarlo, pero creo que soy el entrenador con el que más partidos ha jugado Nacho Cases.

-¿Saldría alguien de esas dos posiciones?

-No tiene por qué. Hay posiciones en las que tenemos mucha gente y que también se podrían aligerar y hay que pensar también que tenemos un filial abajo que está haciendo las cosas bien. Tenemos todavía dos fichas libres, pero no me gusta tener 25 jugadores en plantilla.

-¿En qué se ha equivocado Abelardo esta temporada?

-Posiblemente habría planteado algún partido de otra forma. Siempre cometes equivocaciones, algún cambio, un planteamiento? He tenido la suerte de acertar bastante en los dos últimos años, ahora me he equivocado un poco más, pero soy humano.

-¿Qué valoración hace de la planificación deportiva?

-Son buenos fichajes para el dinero que teníamos. Sé que la gente quizá no lo entienda, pero si supiera el dinero que teníamos y lo que se paga por ahí, no podríamos tener mejores futbolistas. Era muy difícil. Yo creo que hemos mejorado en calidad con respecto al año pasado. Tampoco escondo que jugadores que yo pensaba que me iban a dar más rendimiento, hasta ahora no me lo han dado.

-¿Es algo exclusivo de los fichajes o también le pasa eso con algún futbolista que sigue del año pasado?

-Sí, me pasa con otros. Hay jugadores que no nos están dando el rendimiento del año pasado.

-Con tantas limitaciones económicas, ¿qué le parece que vayan a cobrar los directivos?

-De eso no voy a opinar. Si el consejo de administración decide eso, bienvenido sea. Yo hablo de mi parcela deportiva que bastante tengo.

-¿Duelen algunos cánticos y pitidos de El Molinón?

-Claro que duelen, a mí me duelen mucho porque soy de Gijón. Los entiendo y los respeto, pero me duele mucho, sobre todo por mi familia, que lo sufre más que yo. Soy de aquí, voy a vivir en Gijón y me duele, pero el fútbol es esto. Nadie tiene memoria, Hace dos años era un monstruo, el año pasado era muy bueno y ahora soy un desastre. Si me pitasen en otro club fuera, te marchas y punto. No sé el tiempo que estaré, igual mañana ya no soy el entrenador del Sporting, pero me gustaría que me recordasen por las cosas positivas que he hecho por este club, que creo que han sido muchas. Siempre he intentado defenderlo a muerte, me siento muy sportinguista e intentaré por todos los medios revertir esta situación y que sigamos en Primera.

-¿Dónde se ve dentro de cuatro años?

-Pues no lo sé. Ojalá aquí, aunque posiblemente no de entrenador. Nunca se sabe. Me gustaría quedarme aquí toda la vida, es evidente que de entrenador es imposible, pero estando en el club. Eres profesional y si te tienes que ir te vas, pero mi mujer y mis hijos son asturianos y somos muy de aquí, es difícil movernos.

-¿Alguna vez le habrán tentado?

-Sí, he tenido cosas. El año pasado tuve la suerte de tener ofertas, pero no me las plantee por mi compromiso con el Sporting y con Javier. Estoy muy agradecido e intentaré estar aquí el máximo tiempo posible. Evidentemente, si el club no me quiere, no habrá ningún problema.

-¿Dónde ve al Sporting dentro de cuatro años?

-Espero que en Primera División y peleando por otros objetivos distintos de la permanencia.