"Quiero ver El Molinón que sufrí como visitante: un campo ilusionado con su equipo". Rubi también confiesa estar ilusionado por su primer partido en casa como entrenador del Sporting, el que se disputará pasado mañana ante el Alavés. El catalán espera contar con la ayuda del público para superar al conjunto vasco y lograr la primera victoria desde que asumió el cargo. "Espero que el equipo logre conectar con la afición. Creo que se ganará mordiente con el empuje que nos darán", señaló tras el entrenamiento matinal de hoy viernes, en el que la gran novedad fue la participación de Meré. El ovetense se ejercitó con normalidad y apunta a ser una de las novedades en el once ante el cuadro vitoriano.

Rubi se mostró satisfecho con la llegada de los tres jugadores incorporados durante el mercado de invierno. "Nos pueden dar un valor añadido", explicó sin querer aclarar si todos están a disposición de jugar ante el Alavés. "De momento están entrenándose. Lo iremos valorando", puntualizó sin profundizar en el estado físico de Traoré y Elderson, los últimos en llegar. El técnico del conjunto rojiblanco restó importancia a que el Alavés pueda llegar con cierto desgaste tras disputar la semifinal de Copa del Rey. "Nosotros tenemos que ponerles un nivel muy alto. Nos tiene que dar un poco igual", recordó.

Una de las novedades en el partido ante el Alavés será ver a Rubi sentarse en el banquillo contrario al que el equipo utilizaba, habitualmente, como local. El catalán solicitó situarse en el más próximo a la zona de calentamiento, dado que así está más en contacto con su preparador físico a la hora de planificar los cambios, evita que sus indicaciones puedan ser advertidas por el banquillo rival, y además prefiere estar más en contacto con el juez de línea, que actúa precisamente en esa zona. "Lo hemos dejado todo para decidirlo al final de esta semana, pero el club no me ha puesto problema para hacerlo", señaló el entrenador del Sporting.

Las únicas bajas confirmadas en el Sporting para recibir al Alavés son los lesionados Babin y Douglas. Este último ya se ha dejado ver esta misma mañana sobre el verde de Mareo. Fue para realizar carrera continua y empezar a tocar balón, por lo que se espera que la semana que viene pueda aumentar la carga de trabajo de cara al partido ante el Leganés. La sesión estuvo marcada por la intensidad, con varias entradas duras, como las realizadas por Lillo sobre Xavi Torres y Meré, y otra de Amorebita sobre Ndi.