Llegó en octubre del año pasado y en cuatro meses ha ido desarrollando una pequeña enciclopedia de futbolistas con informes de los cuatro ojeadores que dirige en el Sporting y los que él mismo elabora. Antonio Gómez-Carreño (Toledo, 22-7-1980) es la mano derecha de Nico Rodríguez, director deportivo rojiblanco, y el último filtro previo a la decisión de fichar futbolistas. "Hemos ido elaborando una base de datos propia con jugadores que estamos siguiendo. Habrá unos 1.500 registros", explica tras patearse varios campos de España y viajar a Bélgica, Francia, Portugal, Argentina y Brasil. Traoré, el flamante fichaje del Sporting en el mercado de invierno, estaba en su agenda.

"Los vídeos y las estadísticas te de jugadores son complementos. Para fichar a un futbolista hay que ir a verlo al campo", sentencia Antonio Gómez. Lo dice un licenciado en Educación Física, con el título nacional de entrenador, que tomó contacto con el fútbol profesional a través de explicar a clubes de Primera División programas informáticos dedicados a analizar datos estadísticos relacionados con el juego. Después vino su fichaje por el Rayo de Sandoval, con el que llegó al Sporting por primera vez, la colaboración con la selección de China, de la mano de José Antonio Camacho, también con la Arabia Saudí y más tarde la de Qatar, desde donde ha regresado a Gijón. Siempre, como técnico analista. "Me siento, antes que nada, entrenador. La información, sin una buena interpretación, no sirve", explica mientras maneja un programa denominado "Instat", capaz de resumir, en un "click", el partido entre Maldivas y Bután.

Antonio Gómez ha sido el encargado de ampliar y filtrar la red de seguimiento a jugadores en el conjunto rojiblanco, así como el estudio del juego de los próximos rivales. "El primer paso fue afianzar el seguimiento en España. Tenemos a una persona en Valencia, otra en Barcelona que también viaja a menudo a Francia, y una más en Andalucía", explica sin especificar nombres, antes de añadir el ya conocido de Tomás Hervás, hombre de la casa, que completa el equipo. Un equipo con el que también colabora Isma Piñera, técnico del juvenil A y que además valora refuerzos de cara al Sporting B. Antonio Gómez es uno de los que también ve partidos cada fin de semana, "por el norte de España y Madrid, principalmente. Este fin de semana he estado viendo el Alcorcón-Zaragoza". En unos días volverá a salir al extranjero para ampliar objetivos.

"Cada uno redacta un informe y lo añade a nuestra base de datos. Los ojeadores sólo tienen acceso a su informe, mientras que yo accedo al de todos", explica sobre el método. El seguimiento a un futbolista se resume en una calificación que el toledano explica de la siguiente forma: "Valoramos cada futbolista del 1 al 4; 4 es firmarle en cuanto sea posible; 3, futbolista interesante; 2, que tiene algo que te gusta, pero tienes que seguir viéndolo y 1, descartado", describe.

No desvela la nota de Traoré, Vesga o Elderson, los refuerzos de invierno. "Los tres los habíamos seguido, incluso les habíamos visto en directo. Y sí, había algún 4", se limita a comentar antes de matizar que, en un inicio, parecían inalcanzables. "Eran futbolistas que venían de jugar competición europea este año. Moverse ahí es difícil. Este mundo también te enseña a que nunca hay que cerrar la puerta. Por eso estas bases de datos son muy útiles a largo plazo", explica. El trabajo de campo es uno y la decisión es otra. "Eso ya depende de la gente que está más arriba", comenta sobre quién elige finalmente a quién fichar.

El jefe de "scouting" no ve como un problema trabajar bajo la incertidumbre de saber si el Sporting seguirá o no en la máxima categoría. "En nuestros seguimientos hay futbolistas que se pueden adaptar a los dos escenarios", señala sobre Primera y Segunda División. Confía en el equipo para salir del descenso y sólo piensa en al permanencia como el mejor de los fichajes.