El vestuario del Sporting no oculta de qué lado se posiciona de cara al partido que enfrentará esta noche al Leganés y al Betis. Los rojiblancos necesitan una derrota de los madrileños para sacar el máximo partido al triunfo ante la Unión Deportiva Las Palmas y cerrar la jornada a tres puntos de la permanencia. "Vamos a ser más del Betis que nunca, para qué vamos a mentir. Ojalá nos ayuden", afirma Canella, uno de los capitanes. Un deseo que comparten sus compañeros. Lo curioso es que la mayoría no verá el partido por televisión ni tratará de seguirlo a través de otros medios. El grueso de la plantilla esperará al final del encuentro para informarse del resultado.

"Se pasa mal, y soy de los que prefiero enterarme una vez termine. No miro ni redes sociales, ni el móvil, ni nada", explica Jorge Meré. En la misma línea se expresa Carmona. "No he visto los últimos dos partidos del Leganés y tampoco lo voy a hacer ahora", asegura el balear, gran amigo de Guerrero, de cara al choque de los pepineros. Babin incluso describe la manera con la que intentará evadirse de lo que suceda en Butarque. "Voy a estar jugando a la Playstation, a un juego de Fórmula 1. Salvo que mi novia empiece a gritar, no me enteraré de nada", señala el galo. A otros les pillará en carretera, en pleno regreso de unos días de descanso fuera de Asturias aprovechando que el equipo no se entrenará hasta mañana. "Tengo que ir fuera por unos motivos personales, y a esas horas me va a pillar de viaje, así que no podré verlo", sentencia Isma López.