Por más que Paco Herrera asegurase en su despedida del Valladolid que era pretendido por otros dos equipos, en Mareo reina la calma. La negociación se considera bien encarrilada y la llegada del nuevo entrenador rojiblanco se espera para esta misma semana. No parece que haya motivos para la preocupación, aunque el asunto se aborda con la máxima prudencia, según fuentes del club consultadas. "Hay una tranquilidad comedida", se asegura antes de añadir que "no hay nada que haga pensar que lo estás perdiendo". Por lo tanto, y según todos los síntomas, Paco Herrera se convertirá en los próximos días en entrenador del Sporting por una temporada con opción a otra si consigue el ascenso.

Lo cierto es que las declaraciones de Paco Herrera causaron sorpresa en el consejo de administración rojiblanco. Aunque inmediatamente llegaron mensajes tranquilizadores. Desde el club, se entiende que las declaraciones realizadas por Paco Herrera responden a un interés por dejar claro en Valladolid que aún no tenía decidido su futuro y que no había cerrado el acuerdo con el Sporting, cosa que por otro lado está quedando de manifiesto.

Miguel Torrecilla sigue hablando con el preparador catalán, que ya fue futbolista del Sporting durante tres temporadas, y con su agente, Iñaki Ibáñez, y la negociación avanza a paso firme hacia el acuerdo. El Sporting tampoco quiere dilatar demasiado el nombramiento de su entrenador. Una vez que el Valladolid se ha quedado sin opciones de ascenso y que Herrera ya se ha despedido del conjunto pucelano, se confía en que el asunto quede resuelto esta semana.

Toda la planificación deportiva del Sporting está parada hasta la elección del nuevo entrenador. Una vez confirmado en el cargo, el técnico tendrá que negociar con Torrecilla el estilo de juego que quiere poner en práctica y a partir de ahí se irá diseñando la plantilla, viendo qué miembros de los que tiene disponibles le sirven y qué posiciones hay que apuntalar.

El Sporting confía en cerrar un acuerdo con Herrera, pero ésta no es la única alternativa que maneja. Miguel Torrecilla también ha sondeado la disponibilidad de otros candidatos, incluido un tapado al que no parece fácil convencer. En todo caso, la opción más probable es la llegada de Paco Herrera, que encaja como un guante en el perfil que el propio Torrecilla dijo que buscaba en su presentación.

Si se confirma el fichaje de Paco Herrera, llegaría con un cuerpo técnico formado por cuatro colaboradores. El segundo entrenador es Ángel Rodríguez, recordado en Gijón por su agresión a José Ramón Sandoval. Es el hombre de confianza de Herrera, al que dirigió como jugador en Numancia y Poli Ejido. Luego fue su segundo en Zaragoza, Celta y Valladolid. El preparador físico es Fran Albert, que se incorporó al equipo de Herrera en el Celta y le ha acompañado en Valladolid. David Chorro es el readaptador. En su currículum destaca su trabajo en el primer equipo del Madrid cuando consiguió la décima Copa de Europa. También pasó por Getafe y Atlético antes del Valladolid. José Manuel Santisteban es el entrenador de porteros de confianza de Herrera.