"Han aparecido cosas que no esperaba y son las que más me preocupan". Paco Herrera no necesita torcer el gesto o mostrarse de mal humor para pegar un golpe sobre la mesa y evidenciar que se ha encontrado con una plantilla en inferiores condiciones de lo previsto. "Quiero convertir al Sporting en un equipo ganador, que se lo crean, y hay jugadores que han perdido un poco de su confianza. La temporada pasada hizo mucho daño", señala el técnico, manteniendo la media sonrisa de quien desea inspirar calma en medio de una emergencia. Su toque de atención no se queda ahí, y lo amplía a su amigo Miguel Torrecilla, director deportivo rojiblanco. "La plantilla se nos queda corta. No meto presión, sé las dificultades, pero sería recomendable que empiecen a aparecer jugadores", subraya en relación a los fichajes. A las llegadas del extremo Rubén García y el defensa Quintero quiere unir, cuanto antes, la de otro central.

Herrera pone un ejemplo claro de la expectativa que se había generado y cómo la realidad le ha torcido los planes. Y lo hace a través de esa pérdida de confianza de algunos jugadores que intuye como un problema importante. "El caso más extremo es el de Víctor Rodríguez. Hemos perdido un gran jugador que ha decidido irse porque no ha soportado la presión del año pasado", señala el técnico, aparentemente decepcionado. No tarda en volver a mostrarse positivo y reconoce que intermedió para cerrar la cesión de Rubén García. "Es importante que escuchen el interés del entrenador. El promedio que tengo es bueno", bromea sobre las veces en las que ha ayudado a cerrar operaciones.

El entrenador rojiblanco evidencia más urgencia para acabar de formar la defensa. "Seguimos teniendo problemas con los centrales. Es posible que vengan dos", desliza sin contar a Quintero. El colombiano, al que se le espera presentar en los próximos días, es para Herrera un jugador a descubrir. "No lo conozco. Sí es cierto que la información que poseo es que viene de un año malo", asume. Y es que el técnico considera que el club quizá deba adaptarse a aspirar en el mercado a futbolistas que vengan a relanzar sus carreras y hace un análisis de las llegadas que se han registrado. "Bergantiños es un jugador de garantía, de orgullo y profesional. Sé que nos va a dar rendimiento. A Scepovic lo veo muy implicado. Ha hecho cosas muy buenas aquí y creo que va a estar muy cerca de lo que fue en el Sporting. Barba es un jugador que viene de jugar bastante. Tiene algunos detalles que hay que ayudarle a cambiar, pero asumo esa responsabilidad con todos", concluye.

El hecho de que Paco Herrera piense que hay que fichar un central más está encaminado a que el Babin cambie de aires. El entrenador del conjunto gijonés deja entrever cierta sorpresa con la actitud del francés. "Está con molestias en una zona que no le permite ni siquiera hacer ejercicios en el campo. Le veo raro, aunque es una persona que va de frente", apunta. En la lista de salidas se incluye a Rachid, de quien el entrenador se olvidó cuando nombró las alternativas que cuenta para la medular. Un momento en el que destacó que quizá no haga falta fichar un centrocampista por el buen rendimiento de los que llegan del filial. "Sé que Nacho Méndez, Cristian Salvador y Pedro Díaz compiten, pero con Rachid necesito tiempo, necesito verlo competir", apunta.

Los jugadores que han dado el salto de la cantera son los que parece que más están convenciendo a Herrera. Y se nota cuando se le cuestiona por la portería. "Estoy contento con Diego (Mariño) y Whalley y muy contento con Dani Martín. Es maduro. Está para jugar. El que vea con más concisiones será el que elija", advierte sobre la lucha por la titularidad. Un once inicial en el que reconoce que ve a Scepovic y Viguera como pareja atacante, aunque como una de las muchas alternativas que baraja. El técnico, sin embargo, aprovecha la oportunidad para dejarle un recado al riojano. "Viguera es un jugador a recuperar sí. Tiene que olvidarse de jugar hacia atrás. Un día le vamos a ver jugando a las cartas con el portero", desliza.

A falta de acabar de definir la plantilla, Herrera no cierra ninguna posibilidad respecto a esquemas de juego o nombres. El técnico considera que dos futbolistas del perfil de Sergio y Bergantiños pueden compartir el centro del campo y señala a uno de los capitanes de la plantilla para que recupere su liderazgo dentro del terreno de juego. "A Lora le estoy apretando porque creo que nos va a dar mucho", asegura. Lamenta que a los problemas que intenta solucionar en cuanto a confianza se haya unido otros como el hecho de que "volvimos de Covadonga con cinco o seis casos de problemas de estómago". Herrera, en todo caso, avisa cuando restan tres semanas para el inicio de la competición y hay tiempo a corregir cosas. "Voy a tener que ponerme las pilas el doble", asume el entrenador del Sporting.