La presentación oficial de Álex Pérez como nuevo futbolista del Sporting fue la más atípica de los últimos tiempos y eso que el club rojiblanco ha presentado veinticinco jugadores en las dos últimas temporada. El del central madrileño fue un fichaje relámpago tanto que no dio tiempo a presentarlo antes de su primer entrenamiento y de que formara parte de la convocatoria rojiblanca para Alcorcón. Para colmo, su presentación fue eclipsada por completo por la nueva erupción del "caso Babin" .

Torrecilla no se explayó en el repaso de las cualidades futbolísticas del central, que firma por dos temporadas con opción a una tercera, porque ya lo ha descrito Herrera y se limitó a señalar que "se trata de un central que estuvo con Paco la temporada pasada y que puede jugar tanto en el perfil derecho como en el izquierdo".

"Estoy muy contento, el grupo me ha aceptado muy rápido, han estado muy cercanos a mí y eso me va a ayudar a coger rápido la forma de jugar y a integrarme". Álex Pérez ya pudo convivir con sus nuevos compañeros durante el viaje a Alcorcón. El central es una apuesta importante de Paco Herrera, quien ha influido decisivamente en su llegada: "Tuve un buen con él, me conoce muy bien y sabe lo que puede esperar de mí". El futbolista reconoce que su relación con el técnico es "una ventaja, pero sólo puedo agradecerle el esfuerzo dando lo mejor de mí".

La llegada de Álex Pérez al Sporting fue una sorpresa, pero mayor aún lo fue que el Valladolid facilitase la salida de un futbolista al que renovó hace menos de un mes y con destino a un rival directo, al menos a priori. "Tuve varias reuniones con el Valladolid y es verdad que la dirección deportiva se portó muy bien para que todo fuera más fácil", explica antes de remarcar que "cuando se me planteó la posibilidad de venir al Sporting, no me lo pensé". El zaguero aclara que "estuve muy a gusto en Valladolid, pero sólo pienso en el presente". El Valladolid cobrará una cantidad en concepto de traspaso si el Sporting logra finalmente el ascenso a Primera División.

A pesar de la confianza de Paco Herrera, Álex Pérez no lo va a tener fácil para jugar en Gijón. El madrileño es el cuarto central fichado por Torrecilla tras Barba, Xandao y Quintero, a la espera de la salida de Babin. "Cuanta más competitividad haya creo que es mejor. El año pasado también había mucha competencia y al final se dio bien", apunta.

Para Álex Pérez el objetivo irrenunciable del ascenso no es una carga adicional: "Presión ninguna, es una motivación". Por último confiesa que "saber que el campo va a estar lleno y cómo animan fue determinante para venir aquí".