Rubén García fue el único futbolista del Sporting que terminó el partido ante el Lorca en el parte médico. El valenciano abandonó el terreno de juego aquejado de una sobrecarga de adductores en su pierna derecha. Los servicios médicos le someterán mañana a nuevas pruebas para valorar su estado físico. En principio, no se teme por su presencia para el próximo partido del conjunto de Paco Herrera. Los gijoneses rendirán visita a uno de los grandes favoritos para el ascenso, Osasuna. El encuentro se disputará el domingo, a las 18.00 horas, en El Sadar. El Sporting disfruta hoy de su segundo día de descanso y mañana, a las 10.30 horas, volverá al trabajo.