Osasuna y Sporting son dos viejos conocidos que han vivido algunas batallas juntos desde distintas trincheras. Las visitas a El Sadar no son demasiado productivas para los rojiblancos, que allí prácticamente dijeron adiós a sus opciones de permanencia en la temporada anterior. El conjunto navarro, tras un mal inicio, ha enderezado su rumbo en las últimas jornadas, en las que ha sumado siete puntos sobre nueve posibles. Osasuna se mantiene invicto en su estadio, en el que ha sumado una victoria y dos empates.

El entrenador del conjunto navarro, Diego Martínez, entrenador rojillo, dispone en su plantilla de dos futbolistas que conocen al Sporting desde dentro. Son los casos de Lillo y de Miguel de las Cuevas, aunque ambos viven situaciones muy distintas esta temporada. Lillo es un fijo en el lateral derecho rojillo. El defensa llegó en los últimos días de mercado como un petición expresa del entrenador y se hizo con el puesto de inmediato. Miguel de las Cuevas empezó la temporada como titular, pero luego ha perdido protagonismo y apenas disputa los minutos finales de cada partido.

El atacante alicantino confesó ayer que la visita del Sporting tiene "un carácter especial" para él. De las Cuevas sitúa este enfrentamiento como uno de los destacados en la categoría y sostiene que "es como de Primera, aunque sea de Segunda". Miguel de las Cuevas pasó tres temporadas y media en Gijón, de donde aún guarda "un buen recuerdo y muchos amigos". Los elogios del mediapunta se centran en la afición del Sporting: "La gente de Gijón es espectacular, se vive mucho el fútbol, es muy parecido a Pamplona, un club histórico con el que cualquier jugador se siente identificado". De las Cuevas también valoró los pitos al Sporting y bromeó con que "van primeros, si estuvieran finos...". Más en serio, el alicantino explica que "la afición se queja porque es un club exigente".

Osasuna ensayó ayer con una alineación formada por Sergio Herrera; Lillo, Unai García, Aridane, Clerc; Arzura, Fran Mérida; Sebas Coris, De las Cuevas, Kike Barga y Xisco. Aunque faltaban algunos jugadores.