"Son tres puntos importantes y hay que quedarse con eso". Scepovic deja a un lado su protagonismo en la victoria del Sporting ante el Sevilla Atlético, en la que se convirtió en autor de dos de los tres tantos del conjunto gijonés. Lo hizo después de que se le resistiera la oportunidad de estrenar el marcador desde los once metros. "Los que tiran los penaltis son los que terminan fallando. No soy el único al que le ha sucedido. Hay jugadores de mucho más nivel a los que también le ha sucedido. El portero del Sevilla Atlético también ha hecho una buena parada", subraya el serbio.

"Me quedo con el trabajo del equipo, que es lo más importante, y ahí es donde se ha reflejado la victoria", comenta Scepovic antes de admitir que celebró el primero de sus goles con cierta tensión por haber marrado el penalti. Una pena máxima en la que ya no hubo discusión sobre quién debería ser el lanzador. El mismo Herrera puntualizó tras el encuentro que había designado al serbio como el encargado de ejecutarla de darse alguna a lo largo del encuentro. "Lo celebré con alivio después de haber fallado. Al final, vas cero a cero, y era importante haberse puesto por delante. Teníamos el dominio, era casi el final de la primera parte, y marcar nos dio confianza para entrar en el encuentro mucho mejor tras el descanso. Fue todo más fácil", explica el jugador.

Scepovic terminó sustituido por Castro, cuyo regreso tras dos partidos de sanción provocó que intentara reconciliarse con quienes le silbaron al saltar al campo, asumiendo el lanzamiento de otra pena máxima. Caro adivinó sus intenciones, y el tiro, a lo Panenka, reactivó las críticas sobre el de Ujo. "Apoyo a Castro y a todos los compañeros. Ha fallado un penalti, es normal que tenga rabia por ello. Sólo se equivoca el que tira", comenta Stefan, que al final del partido fue a abrazarle e intentar animarle. "Le he dicho que no pasa nada. Al final me pasó a mí también, le pasó también el otro día a Carmona. No pasa nada", detalla el serbio. Por último, Scepovic admite que estos dos tantos se convierten en una inyección de confianza de cara a los próximos encuentros. "Para un delantero son importantes los goles, pero el trabajo del equipo es lo que ayuda a marcar. Sin ello es imposible que lleguen las ocasiones", concluye.