"Hubo tantas cosas buenas, que hay que quedarse con todo". No hubo pleno de victorias en la semana de los tres partidos, pero Paco Herrera se muestra satisfecho tras empatar ante el Huesca. "En la primera parte fuimos mejores, y en la segunda tuvimos diez o quince minutos de luz, pero después...", comenta el entrenador rojiblanco, que lamenta esa parte final del encuentro. Es por ello que llega a la conclusión de que "debemos dar por bueno el resultado conseguido. El balance de la semana es positivo, porque en los tres partidos hemos cambiado para mejor. Hemos encontrado el lado bueno".

Herrera asume que faltó gasolina en la parte final del partido, pero no oculta su malestar con el árbitro. "No sé si fue penalti. Mis jugadores me dicen que no, pero prefiero no entrar", señala antes de centrarse en otro apartado. "Dos de los tres fueras de juego que le han pitado a Castro en la primera parte no lo eran. Se quedaba solo y nos hubiera dado posibilidades", desliza. Aprovecha para mostrar su satisfacción con el de Ujo, novedad en el once. "Castro nos ha ayudado mucho. Nos ha dado algo hacia arriba que necesita el equipo. Ha llevado a los dos centrales de cabeza en la primera parte", subraya.

El entrenador del Sporting, en todo caso, tira de autocrítica a la hora de analizar el tanto del Huesca. "Arranca desde su defensa y van pasando muñecos sin que seamos capaces de hacer una falta. ¡No hay nadie capaz de hacer una falta!", enfatiza. Más ambiguo se muestra cuando se le pregunta por qué se resisten las victorias ante los de arriba: "Lo sé, pero me lo guardo para mí".