Impresiona su 1,93 metros de altura y la poderosa mano con la que saluda como si se lanzara a blocar un balón. Christian Joel (La Habana, Cuba, 9-7-1999) es uno de los ejemplos de la salud que tiene en la portería la cantera del Sporting. El rojiblanco sumó ante Caudal su tercer partido en Segunda B, con tan solo 18 años, en ausencia por lesión de Dani Martín, un año mayor y el otro gran guardameta que busca hacerse un sitio en el primer equipo. "No tengo muchas oportunidades, y las que me dan, intento aprovecharlas. Lo agradezco", comenta, tras encadenar su tercer triunfo, el "Cubano", como se le apoda en Mareo. Y eso que la nacionalidad de Christian es repartida. De madre francesa, sueña con jugar con la selección de Francia. En los gustos es también internacional: idolatra a un inglés, Joe Hart.
"Llegué a España con cinco años. Empecé a jugar en el San Esteban, de delantero. Un día se lesionó un compañero y decidí ponerme de portero. Ahí me quedé. Ahora no meto goles, sólo los paro", explica Christian sobre sus inicios. Su elección tuvo un fundamento. Su padre, Lázaro Joel, fue portero en la selección de fútbol de Cuba. "Él es mi gran referente", asegura. En un país en el que el béisbol y el boxeo mandan, elegir el fútbol ya supone tener un gran poder de convicción
"Más tarde empecé a jugar en el Alcázar y, a continuación, fiché por el Roces. En infantiles me llamó el Madrid para hacer una prueba. Impresiona Valdebebas. No fue una desilusión no quedarme. Todo lo contrario, se convirtió en un estímulo", explica. La siguiente parada del "Cubano" fue Mareo, donde cumple su sexta temporada. Ha ido creciendo tras los pasos de Dani Martín, con el que compite ahora por un puesto en el filial a pesar de encontrarse en su último año juvenil. "La competencia es dura, pero trabajando y dando el máximo en cada entrenamiento espero convertirme en el portero titular del Sporting B. Me estoy viendo bien, pero todavía me quedan cosas por mejorar", apunta.
No le sorprende la buena marcha del Sporting B, segundo en la división de bronce. "Trabajamos para ello", justifica Christian Joel, que ya ha participado en algún entrenamiento del primer equipo y quiere continuar con su particular estirón. "Mi aspiración es ser portero de Primera División y hacerlo en el Sporting", subraya sin espacio a la duda.
