El duelo entre dos de las canteras más prolíficas del fútbol español en los últimos años lo ganó Mareo por goleada. El Sporting B sacó pecho con un gran primer tiempo en el que superó claramente a los de Tajonar. En un partido tan atractivo, el gran lunar fue la actuación arbitral, con un exceso de celo que comprometió el fútbol y dejó a ambos equipos disminuidos de efectivos.

El factor diferencial fue la contundencia. El Sporting ganó la batalla del centro del campo con Cristian Salvador, Nacho Méndez y, sobre todo, Pedro Díaz y Cayarga, muy inspirados en todo el choque. Claudio sacó el mazo para convertir en gol las primeras llegadas rojiblancas. Un libre directo de Isma Cerró completó la goleada con la complacencia del portero.

El segundo tiempo fue un trámite necesario en el que los guajes buscaron el control y los visitantes quisieron lavar su imagen. Lo hicieron con un gol de Barna en una gran acción individual.